Cordópolis y Datta Capital, un acuerdo para que el valor añadido se quede en Córdoba Redacción Cordópolis

Se acerca el temido calor del verano para las embarazadas y con él las molestias derivadas de la sobrecarga circulatoria que el embarazo conlleva. Molestias que se hacen visibles en forma de hinchazón de piernas, calambres, sensación de peso o claudicación al andar o incluso, las temidas varices y varicosidades.
¿Por qué aparecen las varices en el embarazo?
La razón por la que las varices suelen aparecer es múltiple y no solamente se debe al embarazo y su sobrecarga circulatoria, de hecho, la causa más importante es la hereditaria, aunque no la única. Si una persona tiene tendencia genética, tarde o temprano terminará desarrollando las varices, y el embarazo es un buen predisponente para hacerlas visibles, ya que en la gestación las venas que llevan la sangre de vuelta al corazón son comprimidas por el útero en su crecimiento incesante, por lo que la dificultad para ser drenadas correctamente hace que se manifiesten todos estos síntomas expuestos anteriormente y que se agravan por el calor.
Por otro lado está la causa hormonal, en la gestación aumenta mucho una hormona llamada progesterona, que entre otras muchas acciones, actúa en la pared vascular provocando que se dilate. A la misma vez, el volumen sanguíneo de la embarazada aumenta para satisfacer las necesidades del bebé, por lo que la sobrecarga está servida.
¿Existen diferentes tipos de insuficiencia venosa?
Sí, decir que hay dos tipos de insuficiencia venosa, superficial y profunda. La superficial es menos problemática y es la que nos hace visibles los cambios a nivel de piel como los edemas, la hinchazón, las varicosidades y pigmentación de piel o los calambres. Remite en cierta forma cuando desaparece la causa que la originó (como podría ser una gestación) aunque las secuelas (varicosidades) pueden quedar visibles en algunas mujeres para siempre.
La insuficiencia venosa profunda es más compleja, no es visible a simple vista y hay que tenerla más controlada pues podría dar complicaciones como trombosis, flebitis o hemorragias. Por ello, deberá consultarlo con su médico si tuviese antecedentes de este tipo de patología o si sospecha que pudiera tenerla, pues tal vez necesitará medicación específica.
Consejos para evitar la aparición de varices durante el embarazo
Esperamos que con estas sencillas medidas, puedas pasar un verano algo más liviano en cuestión de molestias de miembros inferiores. Tómatelo en serio, pues una vez aparecen las varices, ya no desaparecerán espontáneamente.
¡¡Feliz verano!!
Autor: Dra. Mª Isabel Martínez Muñoz
Médico Especializada en Educación Maternal y Recuperación Puerperal.
Especialista en Sofrología, Asesora de lactancia Materna y Educadora de Masaje Infantil
Directora del Centro de Educación Maternal C.E.M. Los Arcos
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