Las temperaturas recuperan la normalidad con una caída de hasta 10 grados

La peor ola de calor jamás registrada, al menos en el sur peninsular, llega hoy a su fin. Atrás quedarán cuatro días en los que el valle del Guadalquivir ha elevado su termómetro por encima de los 45 grados de manera sostenida, y más allá de los 47 de manera puntual. Córdoba aeropuerto ha igualado su máxima absoluta de 46.9 °C mientras que Montoro-Vega Armijo, ubicada entre los núcleos urbanos de Montoro y Villa del Río y dentro de la red de estaciones secundarias de la Agencia Estatal de Meteorología, ha sumado una décima a su anterior techo para dejar el récord de temperatura nacional en 47.4 °C. La tarde del domingo le restó ya un par de grados a esos tremendos registros y el comienzo de semana afianzará la tendencia a la baja en el termómetro, para caer a mediados de semana a valores normales para la época del año.

Esa vuelta a la normalidad pasará por un descenso acumulado de unos 10 grados entre el momento álgido del episodio y las temperaturas que se preveen a partir de la tarde del miércoles. Para entonces el termómetro en el valle del Guadalquivir caerá hasta los 37 grados de máxima gracias al desplazamiento de la dorsal sahariana hasta el Atlántico. El calor en altura perderá fuelle con el paso de los días, para volver a coger algo de fuerza ya de cara al fin de semana, aunque lejos para entonces de la intensidad vivida durante estas últimas jornadas.

La tarde del lunes aún será muy calurosa en toda la provincia. La Agencia Estatal de Meteorología tiene activado el aviso naranja en todas las demarcaciones por temperaturas que en el caso de la campiña y el valle del Guadalquivir podrán alcanzar los 44 grados. Las máximas compartirán registros muy calurosos con las mínimas que se den a primeras horas de la mañana, superarando aún los 23 o 24 grados de manera generalizada, y sin que lleguen a bajar de los 27 o 28 grados en cotas medias del sur de la provincia.

Será a partir del martes 17 cuando notemos la primera jornada de cierto alivio térmico. Para entonces, aunque el valle del Guadalquivir aún estará bajo aviso amarillo por altas temperaturas, éstas no pasarán de los 38 o 39 grados. Otros puntos de la provincia verán caer el termómetro incluso por debajo de los 35 grados, en concreto algunas localidades de la Subbética. Junto al descenso de temperaturas también diremos adiós al polvo en suspensión, que para entonces perderá intensidad dejando cielos mucho más limpios.

Esa tendencia decreciente se mantendrá durante las jornadas de miércoles y jueves, cuando el termómetro baje hasta los 36 o 37 en la capital y su entorno, y hasta los 33 a 35 grados en el resto de la provincia. Las mínimas acompañarán esa notable bajada para rondar de nuevo los 20 grados desde la mañana del miércoles, y cayendo por debajo de dicha barrera en la mayor parte de Sierra Morena, el Guadiato y Pedroches.

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