Un plus de esfuerzo entre dudas
“¡Síguele, síguele!”, ésta es una de las consignas más repetidas en la vuelta al trabajo. La orden sale, como es lógico, de José Ramón Sandoval. El preparador madrileño eleva la exigencia a sus jugadores en el regreso al césped del Córdoba. Lo hace sobre todo en lo que se refiere a la presión al rival, a la contención del mismo en ataque. El motivo no es otro que tratar de evitar de una vez por todas que los adversarios logren ver puerta con la facilidad con que lo hicieron normalmente hasta ahora en los duelos del cuadro califal. Ante el Tenerife, el técnico quiere olvidar los errores vistos en las anteriores jornadas. Especialmente algunos importantes en Málaga. Mientras tanto, el de Humanes tiene varias dudas por resolver. La principal es la posible baja de Jesús Valentín, cuya participación ante los canarios está definitivamente en el aire.
La previsión no falló y el zaguero faltó este martes en El Fontanar. El club aguardaba hasta este día para realizar las pertinentes pruebas médicas que aclaren el estado del jugador. De esta forma, el central está a la espera de conocer un diagnóstico después de que en La Rosaleda tuviera que retirarse en el ecuador de la primera parte por un pinchazo. También está pendiente del asunto, como no puede ser de otra forma, el propio Sandoval, que empieza a pensar en un segundo cambio obligado. El primero es el que va a tener que realizar en la portería, donde existe otro interrogante. Aunque éste tiene una respuesta mucho más sencilla, más si cabe visto lo visto en la primera sesión de trabajo de cara al duelo con el Tenerife.
“Lo que me preocupa es tu mano”. Son palabras de Ismael Martínez, segundo técnico blanquiverde, a Marcos Lavín. Debido a la clausula del miedo incluida en la cesión de Carlos Abad al Córdoba, el canario no puede ser de la partida ante el Tenerife. Así, la puerta de la titularidad se tendría que abrir en principio para el madrileño. Pero esta circunstancia se torna imposible tras haber sido improbable hasta ahora. Se mantiene en proceso de recuperación de la lesión en la muñeca que sufrió el 29 de agosto. La entidad permanecía expectante en cuanto a su situación, pero lo cierto es que este martes el guardameta continuó con su trabajo fuera de la dinámica de los demás cancerberos. De esta forma, parece claro que finalmente va a ser Alberto González quien defienda la meta califal el sábado.
El resto de dudas las guarda para sí Sandoval y van en relación al once, como quedó dicho. Tras el tropiezo en Málaga es más que probable que sean más de esos dos los cambios que realice el entrenador madrileño en el equipo. De ahí que sea necesario elevar la exigencia sobre los jugadores, como intentó hacer el de Humanes en una vuelta al trabajo que, por cierto, se retrasó casi una hora. Antes tocó sesión de vídeo y charla en El Arcángel. Con mucha carga física durante todo el entrenamiento, en los partidillos a tres cuartos de campo el preparador califal estuvo muy encima de sus futbolistas sobre todo para incidir en una cuestión: permanecer siempre muy cerca del rival cuando tiene el balón. También no perder la concentración en las marcas, más que nada para impedir goles como los recibidos en Málaga.
0