Nuevo regreso al trabajo con malas noticias para Villa

El Córdoba completa su primera sesión de entrenamiento de la semana con la ausencia de Pelayo, que será baja al menos tres semanas, y con Xisco sin tocar balón

Quizá con cierto regusto amargo todavía por el empate sufrido en el último minuto en el duelo del domingo con el Sporting, el Córdoba regresó esta mañana al trabajo y lo hizo con alguna mala noticia. Por enésima vez en lo que va de temporada, Pablo Villa no pudo contar con todos sus jugadores sobre el césped de la Ciudad Deportiva, que por cierto vuelve a estar cada vez más maltrecho. En esta ocasión, la ausencia fue la de Pelayo, que estará al menos tres semanas en el dique seco. Tampoco estuvo con el resto del grupo, cuando tocó entrenar con el balón, Xisco, que se perdió el partido ante la escuadra asturiana y que es duda para el choque del sábado en Alcorcón.

Regresó al trabajo el conjunto blanquiverde, en definitiva, con un nuevo disgusto, que fue mayor después de conocer el parte médico que el club hizo oficial algo más tarde. Pelayo, que se retiró lesionado del partido que el cuadro califal disputó el pasado domingo ante el Sporting, estará fuera de juego al menos tres semanas. Ése es el período de recuperación estimado por los servicios médicos de la entidad para el centrocampista ovetense, que sufre una lesión en el bíceps femoral de su pierna derecha. De esta forma, a Villa le vuelven a dar quebraderos de cabeza los problemas musculares, puesto que no es ésta la primera baja que tiene en la campaña por dicho motivo.

Otro protagonista de la primera sesión de entrenamiento de la semana del equipo que dirige Villa fue Xisco. El delantero se perdió el encuentro del domingo después de sufrir unas molestias el sábado. Por precaución no fue de la partida el balear, al que se esperaba perder durante cuatro o cinco días, un tiempo que se puede alargar, no en exceso, por la lesión que padece. No en vano, el club también comunicó en el parte médico publicado que el punta tiene una lesión en el abductor de su pierna derecha, algo que le hizo trabajar a menor ritmo que el resto de integrantes del Córdoba. De hecho, participó del calentamiento y de los ejercicios físicos pero no estuvo cuando el balón se comenzó a tocar. Así las cosas, en este inicio de semana su presencia con la escuadra califal en Alcorcón el próximo sábado queda en el aire. Habrá que ver cómo evoluciona.