A Murcia en autobús: primera batalla ganada

Tan mal está el Córdoba que tiene derecho a celebrar cualquier avance. Aunque este sea que podrá abordar en autobús el desplazamiento a Murcia para disputar (domingo, 17:00, La Condomina) su partido de liga ante el UCAM. Fuentes del club cordobesista han confirmado que la entidad dispone de los recursos económicos suficientes para realizar el viaje en autobús, algo que estuvo en duda después de que los administradores judiciales entraran en el club y se encontraran con un panorama desolador, con falta de liquidez y montañas de recibos impagados. Entre ellos, varios a la empresa de autobuses que lleva al Córdoba CF.

Por si no había posibilidad de viajar en bus, el colectivo de taxistas de Córdoba ya había lanzado una iniciativa entre sus componentes para echar una mano al equipo de fútbol. El presidente de Autacor, Miguel Ruano, confirmó que la propuesta había tenido una buena acogida entre los taxistas cordobeses. De hecho, garantizó que se podía cubrir su cálculo para disponer de una flora de entre siete y diez vehículos para trasladar al Córdoba a tierras murcianas. Finalmente, el problema se resolvió y desde la adminitración judicial del Córdoba se trasladó el agradecimiento a los profesionales del sector.

La aportación de varias empresas privadas cordobesas ha sido clave para desbloquear este triste capítulo, que por desgracia para el Córdoba no es el único. El llamamiento que realizó el propio club a través de un comunicado, poniendo a su servicio las vallas del estadio para las casas comerciales, ha empezado a tener respuestas. El alcalde de la ciudad, José María Bellido, también declaró que desde la institución están dispuestos a ayudar al club deportivo más representativo de la ciudad en labores de mediación con el tejido empresarial cordobés.

El desplazamiento del equipo femenino será bastante más lejano. El conjunto blanquiverde, que está situado en la zona alta de la Liga Reto Iberdrola, juega el domingo ante el Club Deportivo Juan Grande, de la localidad de San Bartolomé de Tijarana (Las Palmas). En este caso, el viaje en avión está sufragado por la Federación Española de Fútbol.