Ambición de continuidad

Todo listo y dispuesto para el inicio de una nueva campaña en el Palacio Municipal de Deportes Vista Alegre. Al tiempo que la cúpula directiva solventa los últimos flecos para la competición, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad ya está preparado para volver a sudar sobre el parqué. Así lo hará de nuevo su plantilla, que tiene previsto regresar a los entrenamientos el próximo martes. En efecto, después de dos meses de descanso, tras una dura campaña en lo físico y en lo mental, el 10 de agosto es la fecha fijada por el club para el arranque de la pretemporada. En concreto, será en horario de tarde cuando los jugadores de Josan González se pongan por vez primera este curso a las órdenes del técnico pontano, de cara a un nuevo desafío en la máxima división nacional de fútbol sala. 

Y es que el conjunto blanquiverde encara su tercera campaña consecutiva en Primera División, en la que el objetivo pasa por dar un nuevo pasito en el reto competitivo. La ambición siempre ha acompañado a este club, incluso por encima de sus posibilidades, por lo que no está de más pensar que el plantel puede ya pelear por cotas más importantes dentro de la Liga Nacional de Fútbol Sala. Tras alcanzar dos salvaciones apuradas, aunque en dos de los cursos más duros que se recuerdan, el Córdoba Patrimonio tiene ya entre ceja y ceja alejarse lo máximo posible de ese grupo de equipos llamados a sobrevivir. Quizá aún es pronto para hablar de Copa o de puestos de play off, aunque sí que debería ser un propósito alcanzable estar en la parte media de la tabla. 

Con esa filosofía trabaja el club de José García Román, que en su idea de planificación ha decidido mantener el núcleo fuerte en todos los frentes, añadiendo los mimbres teóricamente adecuados para ese asalto a la élite. De hecho, esa estrategia puede comprobarse ya desde el propio cuerpo técnico, al frente del cual se mantiene Josan González, que estará acompañado por el argentino Emanuel Santoro como segundo técnico. Un estudioso del fútbol sala que ejercerá de mano derecha del de Puente Genil. Asimismo, en ese grupo de trabajo también se incluye al psicólogo Nacho Osuna.

A partir del martes se iniciará una ronda de entrenamientos para ir poniendo a punto al plantel. El equipo tendrá por delante algo más de dos semanas para prepararse lo mejor posible antes del primer amistoso, que se desarrollará el 25 de agosto en Hinojosa del Duque ante el filial del Betis. Una carga de trabajo intensa pues está previsto que haya entre nueve y diez duelos preparatorios en un mes vista. La liga comenzará el 8 o 9 de octubre en la cancha del Jimbee Cartagena. 

La continuidad también se ha visto en la plantilla, donde, a pesar de producirse muchas bajas, mantiene al bloque más importante del equipo. La portería sigue intacta con Cristian Ramos y Alfonso Prieto, además del joven Víctor, una situación similar a la del puesto de cierre, donde continúan pesos pesados como Pablo del Moral, Ricardo Mayor, Caio y Jesús Rodríguez. 

Los puestos de ala son los que han sufrido mayores variaciones, aunque ahí actuarán de nuevo hombres como Jesulito, Lucas Perin y Zequi, a los que se suman el joven brasileño Álex Viana y el experimentado Miguelín. Sin duda, el refuerzo del mallorquín es uno de los puntos más destacados en el mercado de la LNFS, pues el Córdoba Patrimonio se ha hecho con un jugador histórico del fútbol sala español y que, según ha asegurado él mismo, aún tiene mucho que dar. De hecho, su experiencia deberá ser el factor decisivo a la hora de resolver encuentros igualados y de mantener la entereza para lograr el objetivo. Un jugador en sintonía con Josan, al que conoce a la perfección de su etapa en ElPozo, y que será su prolongación sobre la pista. 

También desde tierras murcianas llegó el cordobés Ismael López, que regresa a la entidad que le vio nacer como futbolista profesional. Compartirá posición en el pivote con Alberto Saura, el gran referente del club, y el nipón Shimizu.