El debut soñado del Pozoalbense

Defender el escudo de tu ciudad en una categoría nacional es sin lugar a dudas un orgullo enorme para cualquier jugador, sea cual sea el deporte que practiques. Además, hacerlo con el equipo de tu localidad adquiere un carácter casi heroico, y más aún, en categoría femenina, dadas las dificultades con las que cuentan todos los conjuntos para tener un cierto espacio mediático. En este sentido, el debut del Pozoalbense Femenino en Segunda División no ha podido deparar un mejor sabor de boca, tanto para la entidad como para los más de 17.000 habitantes del municipio. Una promoción que llegó auspiciada tras años y años dedicados a la cantera, la cual se ha convertido en una de las más prolíficas de toda Andalucía, y una a tener en cuenta en el panorama nacional.

Un ascenso fraguado a base de sueños, esfuerzos y mucho talento. Así se presentaba el conjunto pozoalbense el pasado domingo en su cancha, en la que le tocaba recibir al Puerto de la Torre malagueño en la primera jornada de liga. Un día histórico para la entidad, que se resolvió de la mejor forma posible. Los goles fueron sucediéndose sin parar, ante la euforia de la afición local. Uno tras otro. Loba y Elena González abrieron el luminoso para las suyas. A los veinte minutos, el Pozoalbense ya mandaba por 3-0. Para frotarse los ojos. Pero aquello no era un sueño. El dominio cordobés se palpó de principio a fin, ya que, pese a que las malagueñas lograron recortar distancias, Arévalo, Juani Torres y Andrea pusieron el sello definitivo a una aventura nacional que empieza de la mejor forma posible. 8-4 y los tres puntos para casa.

De hecho, el fútbol femenino en la provincia traerá más de una alegría esta temporada. Hasta 29 goles se pudieron ver entre los tres partidos de los representantes califales. A la victoria del Pozoalbense, se unió otra goleada por parte de El Naranjo, que se deshizo del Daimiel Femenino por 1-7. No obstante, La Rambla no pudo completar el triplete de triunfos, ya que cedió ante el Extremadura por 7-2. De esta forma, las capitalinas y las vallesanas ya colideran la tabla, en segunda y cuarta posición respectivamente.