Córdoba CF

— Rival

Un CD Mirandés en plena construcción para la vuelta a LaLiga Hypermotion

Llegó el momento de volver a competir, volver a sufrir y volver a disfrutar. El Córdoba CF está de vuelta en el fútbol profesional, de vuelta en Segunda División, y su bienvenida la llevará a cabo un CD Mirandés conocido por todos gracias a su buena labor en LaLiga Hypermotion durante estos años. Los de Miranda de Ebro, pese a ser un club humilde en la categoría, han logrado asentarse y suponer un reto para todos sus rivales, basándose en el empuje de su campo, Anduva, y en una política de cesiones que le han permitido ser un referente en este sentido para muchos otros clubes.

Tras varios años en la categoría de plata, el CD Mirandés descendió a Segunda División B allá por el año 2017, cuando el Córdoba CF aún militaba en Segunda División. La primera campaña en el bronce no lograron el ascenso pese a participar en play offs, pero sí que lo lograrían en la 2018-19, venciendo a Atlético B, Recreativo de Huelva y Atlético Baleares para volver al fútbol profesional. Así, en el año en el que el Córdoba CF consumaba su descenso a Segunda División B, el CD Mirandés volvía a la categoría de plata, donde ha permanecido desde entonces.

Un lustro, cinco años, en los que los blanquiverdes han vagado por las categorías inferiores del fútbol español mientras que el CD Mirandés, un humilde equipo del Municipio de Miranda del Ebro (35.477 habitantes) ha logrado asentarse en LaLiga Hypermotion. Así, en la 2019-20, finalizaron en un meritorio undécimo puesto en liga, además de alcanzar sorpresivamente las semifinales de la Copa del Rey. Al año siguiente mejorarían su condición en liga, alcanzando el décimo puesto, mientras que en la 2021-22 caerían hasta el decimocuarto lugar. Comenzaban los problemas, que se agravarían en la 2022-23 (16º) y tocarían fondo el pasado año, que lograron la permanencia (18º) en el último partido de liga.

A lo largo de estos años, el CD Mirandés, comandado por su antiguo director deportivo, Chema Aragón, ha instaurado una planificación deportiva basada en multitud de cedidos por parte de equipos de Primera y Segunda División. Eso le ha llevado a alcanzar un gran nivel deportivo, pero poca proyección de futuro y pocos ingresos, lo que ha llevado a LaLiga a ir recortando cada vez más su ya de por sí bajo límite salarial. Ellos le ha llevado a entrar en una espiral por la que, actualmente, tan solo cuentan con apenas diez futbolistas en propiedad actualmente.

Por ello, el proyecto deportivo comandado por el entrenador, Alessio Lisci, ha llegado mal, en tarde y forma, a este primer encuentro liguero. El CD Mirandés ha remozado su plantilla, de nuevo, con múltiples cesiones -LaLiga solo permite, como máximo, seis cesiones de jugadores mayores de 21 años-, como son los casos de Victor Parada, Hugo Rincón, Gorrotxategi, Urko Izeta u Homenchenko, pero, aún así, el club apenas cuenta actualmente con quince jugadores, dos de ellos porteros y hasta ocho defensas. Así, restan cinco centrocampistas y tan solo un delantero, Urko Izeta.

Está circunstancia ha llevado al equipo a tomar decisiones extremas durante esta pretemporada, puesto que la plantilla sigue, aún actualmente, en composición. Múltiples movimientos están aún en marcha, pero los efectivos son realmente cortos, y esta situación ha sido incluso más grave al inicio de pretemporada, cuando apenas contaban con ocho futbolistas. De hecho, el CD Mirandés no ha logrado vencer en ningún partido de pretemporada, empatando a un frente a Osasuna y Barakaldo, y cayendo contra Bilbao Athletic (3-0) y SD Tarazona (1-0). Además, los de Miranda de Ebro tuvieron que cancelar su encuentro de presentación frente al RCD Mallorca ante la falta de efectivos del plantel.