San Pablo vuelve a ver la luz en la Mezquita

Una de las capillas de la Mezquita Catedral de Córdoba que necesitaba con mayor urgencia una restauración era la de San Pablo. Fechada a finales del siglo XIV, este espacio dedicado a la conversión del santo al cristianismo, presentaba peligros de desprendimientos y graves problemas en su estado de conservación general. Por eso, era obligado acometer una intervención integral que recuperase no solo la estabilidad de los elementos sino su policromía y decoración.

Las restauradoras encontraron que en los elementos ornamentales de yeso, íntimamente ligados a los paramentos constructivos, aparecía humedad por filtraciones. Esto provocaba a su vez que aflorasen microalgas y hongos, que afectaban también a las pinturas. Para su restauración, en un primer momento se ha aspirado y retirado estos elementos orgánicos. Luego se actuó de urgencia en las zonas a punto de desprenderse.

También se eliminaron clavos y alambres oxidados que fueron sustituidos por fibra de vidrio en las zonas con riesgo de caída. Por último se procedió a la reintegración de los dorados con pan de oro mientras que los originales se han recubrieron con resinas sintéticas resistentes para evitar el oscurecimiento gradual.

El canónigo obrero de la catedral- el encargado de supervisar los trabajos de conservación y rehabilitación ha señalado que las obras han costado 300.000 euros que han salido directamente de las arcas del Cabildo, sin repercutir, afirma, en el erario público.