'Marcaje al hombre' del PP a Servicios Sociales

Desde el 28 de marzo, la concejala popular, María Jesús Botella, ha solicitado 37 informes de la actividad del Área | Quejas de los técnicos porque, con el personal disponible, o se contesta a las cuestiones o se atiende el día a día

El Partido Popular en el Ayuntamiento de Córdoba ha fijado en el área de Servicios Sociales uno de sus puntos prioritarios y, para ello, ha fijado una estrategia de marcaje que tiene de protagonista a la concejala María Jesús Botella, antigua responsable del Área. En el plazo de 37 días ha reclamado, por escrito y por el registro de entrada del Ayuntamiento, nada menos que 37 informes sobre otros tantos puntos de la actividad y del trabajo del personal de la delegación.

Datos de la ocupación de la Casa de Acogida, contratos menores del mes de enero, trabajadores adscritos a cada uno de los centros de Servicios Social y los partes de baja si los hubiera, personas atendidas por la Unidad de Calle, familias y menores atendidos por la Unidad de Tratamiento Familiar, menores usuarios de la unidad de estancia diurna, datos de la Ayuda a Domicilio, listas de espera, usuarios del servicio de comidas, media y tiempo de atención de los usuarios de Servicios Sociales, número y cuantificación de las ayudas de emergencia... Y así hasta 18 informes de datos que se reclaman el pasado día 28 de marzo y que se refieren a los dos primeros meses del año.

Treinta y siete días después, llega otra batería de peticiones, con fecha 4 de mayo, cuando Botella vuelve a plantear un nuevo escrito en el que se insiste en todos y cada uno de los aspectos que había reclamado en marzo y pide una actualización de los datos que se concreta en una lista de dos páginas con 19 temas a desarrollar y detallar por parte de los trabajadores del Área.

En total, en estos 37 días María Jesús Botella ha reclamado otros tantos informes sobre la actividad de un área cuyos técnicos ya han expresado su malestar por esta insistencia en los informes. Según han confirmado las fuentes consultadas en Servicios Sociales, el enfado de los trabajadores municipales se debe a que, en uno de las delegaciones más afectadas por la falta de personal, no se puede tener a varias personas trabajando en la recopilación periódica de datos para el archivo de la edil popular.