Ecologistas en Acción eleva la mortandad de peces por el orujo a 50.000 individuos

El río tardará en recuperarse pero se recuperará, confiamos en ello. A diferencias de otros sistemas menos dinámicos los cursos fluviales tienen una gran resiliencia por lo que pueden volver a su estado inicial en el corto-medio plazo tras una perturbación. Cuanto tiempo pasará es difícil decirlo pero el hecho de que veamos el agua de nuevo con un color verdoso, o que ya no haya peces muertos flotando, no debe darnos una falsa impresión de recuperación, quizá debajo hay poca cosa. Ecologistas ha convocado una concentración de protesta el sábado 1 de julio junto a la Calahorra.

Ecologistas en Acción ha elevado la mortandad de peces por el vertido de orujo de la semana pasada a 50.000 individuos. En una nota, calculan que si se han recogido 4,5 toneladas de peces, “corresponderían de 45.000 a 50.000 individuos, según los tamaños que ha encontrado la CHG”. Pero en Ecologistas en Acción creen que son muchos más.

“Los parámetros físicos, como el oxígeno, ya estén posiblemente recuperados, y también gran parte de los contaminantes se habrán distribuido a lo largo de la cuenca y llegarán próximamente al mar. Ahora toca evaluar lo que se ha quedado aquí. Y una vez recuperado el medio físico le toca el turno a la vida que el vertido haya podido arrastrar”, señala el comunicado.

“Hay microorganismos muy tolerantes pero otros no lo son tanto, como tampoco lo fueron los peces y otros seres vivos. Se recuperarán gracias a los aportes de afluentes y del mismo Guadalquivir aguas arriba del vertido. Poco a poco irán recolonizando… pero tardarán y será a costa de repartir las poblaciones que hayan quedado en esos otros ambientes mientras se vayan reproduciendo”, prosigue Ecologistas en Acción.

“Será difícil saber cómo el río ha afectado a otras especies. El mismo viernes los vencejos y aviones comunes no bebían en el río, ni bajaban a buscar mosquitos (quizá tampoco había), como les habrá afectado un día entero de contaminación no lo sabremos. Tampoco podrán opinar las nutrias, que se estarán limpiando el pelaje. Y podríamos sumar muchas más especies visibles o invisibles a nuestra mirada”, insiste la formación.

“Los ríos se recuperan , como lo hacemos las personas, pero a nadie se le escapa que una persona sana se recupera mejor que una persona enferma. Y esa es otra parte del problema, nuestros ríos no están sanos y ante cualquier episodio de este tipo su capacidad de recuperación no es la misma”, añaden.

“En Ecologistas en Acción pensamos que ahora debemos centrarnos en su monitorización, en evaluar su estado y en discernir todos los fallos que han podido causar este desastre, para pedir responsabilidades y para pedir mejoras en los protocolos de prevención y actuación que impidan que algo así pueda repetirse”, concluye.

Reacción de la Junta

“Vamos a actuar con contudencia dentro de nuestras potestades porque el episodio ha sido importante”, ha afirmado este miércoles el delegado de Medio Ambiente de la Junta en Córdoba, Francisco de Paula Algar. El delegado informa de que los técnicos de la Consejería se personaron en Pedro Abad para analizar las balsas. “Hemos pedido informes a la empresa para que nos detalle las causas y ver qué medidas se van a tomar para que no vuelva a ocurrir”, añade De Paula.

La Junta tuvo conocimiento del vertido el lunes alas 13:00. En principio, calculan que se vertieron 150 metros cúbicos “pero a tenor de la mortandad de peces creemos que, o bien es más cantidad, o el volumen de contaminante es superior”.