Córdoba dejará de usar agua potable para regar los jardines a partir del verano

Córdoba comenzará a dejar de usar agua potable para regar los jardines y zonas verdes a partir del verano. Esa es la previsión de fechas que maneja el Ayuntamiento, cuando concluyan en el mes de julio la primera fase de las obras que actualmente lleva a cabo la empresa municipal de aguas Emacsa para instalar un nuevo sistema que aproveche para el riego el agua de la limpieza de filtros de la estación depuradora de Villazul.

Así, las obras para instalar este sistema con las canalizaciones necesarias desde la estación de Villazul comenzaron en el mes de julio de 2018 y está previsto que terminen en el mismo mes de este año, según han confirmado fuentes de la empresa municipal Emacsa a este periódico. Actualmente, la ejecución de estas obras se encuentran al 60%, explican. Cuando finalicen, el sistema de riego será recepcionado por el área de Parques y Jardines municipal -encargada del cuidado de las zonas verdes de la ciudad-, y comenzará su uso con agua no potable.

Este nuevo sistema de riego permitirá ahorrar 178.000 metros cúbicos de agua potable que actualmente se destinan al riego de jardines. La primera fase de este proyecto consiste en la ejecución de la red de distribución desde La Asomadilla a uno de los puntos con mayor demanda hídrica de las zonas verdes de la ciudad, que es el Parque Cruz Conde.

La instalación de las nuevas conducciones comenzó en julio del pasado año y en estos meses ha ido avanzando para canalizar el agua de riego desde Villazul a distintos parques y jardines de la ciudad. Así, esta primera fase dejará conectada la estación depuradora con con otros grandes puntos de consumo de agua de riego, tales como los jardines de Escultor Fernández Márquez, la zona verde Antonio Pareja García (Santa Rosa), las del Vial Norte, los Jardines de la Agricultura, los Jardines de la Victoria y los Jardines de Conde Vallellano.

Conducciones y bocas de riego

Estas obras, que cuentan con un presupuesto en su primera fase de 854.733,77 euros, instalarán las nuevas conducciones y las bocas de riego en los jardines. Desde ellas se regarán las zonas verdes con todo el agua que se utiliza actualmente para la limpieza de filtros de la estación depuradora de Villa Azul.

Asimismo, con este nuevo sistema se consigue utilizar un menor volumen de agua potable procedente del embalse del Guadalmellato y, además, se mejora la sostenibilidad del propio sistema, ya que se genera un mejor aprovechamiento de los recursos disponibles, produciendo por tanto un menor impacto medioambiental, aseguran desde Emacsa.

El proyecto global tiene dos fases más, en el proyecto que se redactó en 2017, y contempla que el sistema de riego de zonas verdes con agua no potable abarque al conjunto de la capital cordobesa.