Comenzaremos un nuevo mes de septiembre, después de los merecidos días de descanso, volvemos a nuestro día a día.
El mes de septiembre es un mes en el que nos vamos a encontrar con nuestros gastos habituales más los gastos extras de la vuelta al cole de nuestros hijos.
Más gastos con los mismos ingresos, difícil obtener un resultado positivo.
Si nos encontramos en esta situación, quizás merezca la pena dedicar unos minutos a seguir leyendo para ver qué podemos hacer.
Lo primero que debemos conocer para intentar tener menos “gastos”, es saber qué gastos tenemos.
Detalla cuáles son tus gastos fijos mensuales.
Analiza si todos son necesarios.
¿Estás pagando una cuota a una suscripción de una revista que apenas lees o pagando un gimnasio al que nunca vas?
Una vez detectados los gastos “innecesarios” de los que puedes prescindir, analiza si puedes pagar menos por los gastos necesarios.
¿La cuota que pagas por tu móvil o recibo de la luz se podría mejorar?
¿Puedo pagar menos en mi seguro del coche o de mi vivienda?
Apartado especial tiene revisar el recibo de tu hipoteca.
Si aún no te han revisado en este año tu hipoteca, aún estarías a tiempo de no llevarte una desagradable sorpresa.
Si estás pagando una hipoteca a tipo de interés variable, aún puedes intentar encontrar una hipoteca a un interés fijo competitivo inferior al Euribor.
Revisa todos los cargos de tu tarjeta de crédito, puede que te ayude a no pagar por algo que no debes pagar.
Evita pagar a plazos las compras que realices con tu tarjeta de crédito si te van a cobrar intereses, algunas tarjetas sí te permiten realizar aplazamientos sin cobrarte intereses.
Comprueba con cierta periodicidad los movimientos de tu cuenta bancaria, evitaras cargos indebidos o comisiones indeseadas.
No dejes nunca tu cuenta bancaria en descubierto, evitarás pagar demoras y descubiertos caros.
Además de intentar ajustar tus gastos, puedes pensar en conseguir algo de “ingresos” por tu ahorro, pequeño o grande.
Existen entidades bancarias en las que conseguir un ingreso “extra” por el saldo de tu cuenta bancaria o por domiciliar tu nómina.
Tan importante puede ser gestionar tus gastos como la gestión que puedes realizar del dinero que tengas en función de tus circunstancias.
Y no olvides plantearte un “presupuesto familiar” que te ayude a controlar tus gastos familiares.
Septiembre es el mes de “los nuevos propósitos”, atrévete.
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