El finde de Todos los Santos vendrá marcado por algunas lluvias y temperaturas frescas
La semana está transcurriendo algo diferente al resto del mes de octubre, con temperaturas más normalizadas y lluvias que han sido generosas, especialmente el miércoles, con registros que han rozado los 100 litros en 12 horas en algunos puntos de la región. Unas lluvias que parecen haber pillado por sorpresa a muchos, ya que ni se había nombrado a la borrasca por alto impacto, ni se había emitido aviso especial por lluvias extraordinarias, como sí fue el caso y se anunciaba en este periódico. En cualquier caso, la borrasca sin nombre dejó un día de lluvias intensas, generando algunas incidencias localizadas en nuestra región, siendo más importantes en las provincias vecinas de Sevilla y Huelva.
El viernes llega marcado por el acercamiento de una nueva borrasca por el oeste peninsular que dejará cielos cubiertos y posibilidad de lluvias débiles en la mitad occidental de la provincia, especialmente en zonas de la Sierra y Los Pedroches, donde los chubascos podrían ser más persistentes durante las primeras horas del día. En la Campiña y el Valle del Guadalquivir las precipitaciones serán más dispersas, aunque la nubosidad será abundante. Las temperaturas máximas experimentarán un ligero descenso, situándose entre los 20 y 22 ºC, mientras que las mínimas se mantendrán frescas, en torno a los 12/14 ºC. El viento soplará de componente oeste con rachas moderadas, sobre todo en zonas elevadas.
El sábado 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, amanecerá con un tiempo estable en general, pero con mucha nubosidad de tipo medio y alto. No se descartan algunas lluvias residuales en las sierras del norte y sur de la provincia, mientras que en la capital y la Campiña predominarán el ambiente variable. Las temperaturas se mantendrán sin grandes cambios, con valores máximos cercanos a los 21 ºC y mínimas que podrían descender hasta los 10 ºC en zonas de sierra.
A últimas horas del domingo, el frente semiestacionario que rondará el noroeste de la Península Ibérica se adentrará hacia el interior, afectando tangencialmente a nuestra región, dejando una primera mitad del domingo más inestable, con cielos nubosos y precipitaciones débiles que se irán repartiendo por la provincia, siendo más destacables en puntos del oeste y norte de la región. El viento soplará del suroeste, aunque tras el paso del frente, rolará a componente noroeste, dejando un descenso térmico de cara a la madrugada del lunes.
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