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Villa, en el adiós: “No pasa nada, la vida sigue para todos”

Villa da instrucciones bajo la lluvia en el partido ante el Éibar. FOTO: MADERO CUBERO

Paco Merino

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El Córdoba coloca a Luismi Carrión de modo provisional hasta la llegada de un nuevo técnico tras el fiasco ante el Éibar

“Si alguien no está contento conmigo, ya sabe lo que tiene que hacer”, declaró Pablo Villa ante los periodistas a propósito de su futuro en el Córdoba. Mientras el alcorconero desgranaba en la sala de prensa sus sensaciones sobre el fiasco ante el Éibar, nuevo líder de Segunda tras imponerse por 0-2 en un partido disputado bajo un aguacero, el lacónico texto oficial que publicó la web apenas una hora después ya estaba redactado. “Pablo Villa deja de ser entrenador del Córdoba CF y el encargado de dirigir al primer equipo será Luis Carrión. El Club agradece el trabajo y esfuerzo realizado por Pablo Villa y le desea la mayor de las suertes en su futuro profesional”. Fin de etapa. Veinticinco partidos, con 9 victorias, 7 empates y 9 derrotas. 28 goles a favor y 28 en contra. Décimo, a dos puntos del play off... y a cuatro del descenso.

“Nuestros socios no se explican cómo no hemos ganado y por qué estamos en esta situación”, ha declarado en los micrófonos de La Jugada de Canal Sur el presidente, Carlos González, que ya tendrá apalabrado al sustituto. De momento, se hace cargo del plantel Luis Miguel Carrión, ex blanquiverde y ayudante de Villa desde este verano. Desde la derrota casera ante el Deportivo comenzaron a circular de nuevo nombres de posibles aspirantes al banquillo. Se habló de Bordalás, que ha vuelto al Alcorcón. Los nombres de Abel Resino y Fabri están en la órbita blanquiverde. El relevo en el banquillo será el truco final en la actuación de Pedro Cordero, el nuevo director deportivo, en un mercado invernal frenético.

Quizá Villa sabía ya que no iba a continuar cuando compareció ante la prensa. El ya ex técnico cordobesista se lamentó por “los errores” en la retaguardia, que fueron fundamentales para decidir un partido en el que el Éibar “nos ha hecho daño sobre todo por las bandas”. “Esto es día a día. Lucha, lucha, lucha y lucha. A los jugadores no tengo nada que reprocharles. En el fútbol sólo queda volver a trabajar para ser compoetitivos y demostrar que tienes posibilidades”, ha dicho. No será su caso. “No miro lo que puede pasar. Yo trabajo para ayudar y para intentar, desde mi posición, aportar todo lo que puedo. Si alguien considera que no debo de estar aquí pues ya sabe lo que tiene que hacer. No pasa nada, la vida seguirá para todos”, ha reflexionado Villa, que deja como legado un equipo con opciones matemáticas pero con pobres sensaciones en el tramo final del campeonato.

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