Sería una pena no hacerlo

Veamos. El Córdoba está inmerso en su mejor racha como anfitrión. Perdió por última vez el 12 de febrero, ante la SD Huesca, y desde entonces ha sumado 17 puntos sobre 21 posibles. Empates contra Numancia y Mirandes; victorias frente a Alcorcón, Zaragoza, Elche, Almería y Reus. Todas ellas apuradas, sí, y con goles en los minutos postreros. Pero precisamente esa angustia satisfactoriamente resuelta ha generado una sensación de invulnerabilidad que ha calado en el equipo. Y también en la gente. El cordobesismo ha aparcado las críticas -no hacia la propiedad, ojo- y ha enarbolado la bandera para defender lo que sí es suyo. Las escenas de hermanamiento entre los hinchas y los futbolistas han sido frecuentes. Hay feeling. El Oviedo llega con un lastre de seis jornadas sin ganar. El Arcángel, en este domingo postferial, registrará una sobresaliente entrada. El club regaló localidades a sus abonados y vendió packs dobles a cinco euros. Buena racha, ambiente en las gradas, un rival accesible, un objetivo claro y a la vista... Todos los ingredientes están. Sería una pena no hacerlo.

Carrión está en disposición de calcar el once de los dos últimos partidos. Con Piovaccari de salida. El ingreso del italiano, un tanque de sangre caliente, ha tenido su efecto. El de Gallarate no ha marcado gol, pero los que no lo hacían sí recuperaron su inspiración. Rodri y Alfaro, saliendo desde el banquillo, firmaron goles determinantes en las dos últimas semanas. Por lo demás, la retaguardia está funcionando a buen nivel pese a la baja de Héctor Rodas, que sigue fuera de combate por lesión. La receta está clara: disciplina, pocos miramientos a la hora de sacar la pelota y Kieszek. El portero polaco está siendo clave en este final de temporada. Sus intervenciones han salvado puntos.

El Oviedo acude con opciones de clasificarse para el play off de ascenso a Primera División pese a presentar una cochambrosa estadística en sus desplazamientos. Los de Fernando Hierro solo ganaron una vez lejos del Tartiere en los últimos seis meses -y fue al colista Mirandés-, pero aún así conservan posibilidades de estar el próximo año en la élite. Esa es la realidad de Segunda. En sus filas llegan viejos conocidos: el lateral derecho Fernández, un canterano al que el club intentó repescar sin éxito en varias oportunidades, y el extremo Nando, figura emergente del Valencia que pasó a préstamo por El Arcángel y que este año ha despachado un curso irregular en Asturias. No estará -por cláusula y por lesión- el mediocentro Borja Domínguez, al que el Córdoba envió como cedido al Oviedo en el mercado invernal después de que el ex del Racing de Ferrol solicitara -“de modo inesperado”, según señaló el club por entonces- marcharse de inmediato.

El Córdoba-Oviedo puede dejar el curso resuelto. El suspiro de alivio puede ser total si se dan los resultados favorables en otros campos, aunque todo pasa por agarrar los tres puntos “como sea”, según explicó muy gráficamente esta misma semana Federico Piovaccari. Con dos jornadas más por delante -visita a Vallecas y cierre en casa frente al Girona-, el Córdoba podría tener tranquilizar para desvelar las claves de su porvenir.

ALINEACIONES PROBABLES

CÓRDOBA: Pawel Kieszek, Antoñito, Caro, Deivid, Bíttolo, Edu Ramos, Sergio Aguza, Javi Lara, Pedro Ríos, Javi Galán y Piovaccari.

OVIEDO: Juan Carlos, Cristian Fernández, David Costas, David Fernández, Diegui, Torró Erice, Nando, Susaeta, Carlitos y Toché.

ÁRBITRO: Arcediano Monescillo (Comité Castellano Manchego).

CAMPO Y HORA: El Arcángel (20:30).