Con margen de maniobra

La Tercera División ha sido una de las ligas que más ha crecido en el presente curso con respecto a la temporada pasada en cuanto a equipos cordobeses. Se ha pasado de uno a los tres representantes que se encuentran actualmente compitiendo en el Grupo X de la cuarta categoría del fútbol español. Son los casos del Atlético Espeleño, el Salerm Cosmetics Puente Genil, que volvió a dicha competición después de 25 años, y el CD Ciudad de Lucena, un equipo joven, que sustituye a la mítica (y desaparecida) entidad aracelitana, y que se hizo con la promoción tras el ascenso del Écija a Segunda B, propiciando además el salto del Montilla CF a División de Honor.

Los tres conjuntos han mostrado su rendimiento en base a sus posibilidades, aunque aún tienen mucho margen de mejora, sobre todo en los encuentros como visitantes. Sin duda, el principal activo ha sido el equipo pontanés, que se ha erigido como uno de los clubes revelación en lo que va de temporada. Los de Juan Arsenal han jugado en casi todo momento con los puestos de promoción, y al cierre del año ocupan la octava plaza con 27 puntos, tras una racha irregular de dos empates y una derrota en los tres últimos encuentros. Eso sí, apenas seis puntos les separan de la zona de honor. Además, el Puente Genil ha logrado hacer del Manuel Polinario un auténtico fortín y a día de hoy puede presumir de ser el segundo mejor local del grupo, y una de las tres únicas plantillas que aún no ha cedido en casa. Un balance de tres triunfos y seis empates le otorgan la medalla de plata en este apartado, por detrás del Cádiz B (6-3) y superando al CD Guadalcacín (2-7).

Por su parte, el Atlético Espeleño cumple su segundo año histórico en Tercera. A las órdenes de Rafa Navarro, la localidad de Espiel está viviendo la mejor etapa futbolística en sus 35 años de vida. Las dificultades económicas han lastrado el nivel de la plantilla con respecto al pasado año, en el que estuvieron muy cerca de meterse en los puestos de play off, pero aún así se mantienen estables en la zona media. La entidad del Valle del Guadiato se sitúa en la decimocuarta posición con 23 puntos, los mismos que los dos adversarios que tiene por encima.

Por último, el que más ha sufrido el salto de categoría ha sido el Ciudad de Lucena, anclado durante todo el inicio de curso en los puestos de abajo, aunque una buena racha (dos empates y dos victorias) en el tramo final le ha permitido tomar algo de oxígeno. Los de la Subbética ocupan el decimoctavo puesto, el primero que da billete al descenso, con 20 puntos. Su principal tarea a mejorar estará en los encuentros a domicilio, donde aún no ha podido sumar de tres en tres, estableciendo una estadística de seis empates y cuatro caídas. Una cuenta pendiente que pasa principalmente por echar el cerrojo atrás, el gran lastre tanto para los lucentinos como para los espeleños. De hecho, éstos últimos son segundos en producción ofensiva con 31 tantos, mientras que el Ciudad de Lucena es cuarto en ese criterio con 28.