En Lucena lo saben: el dinero no garantiza la felicidad

La situación económica no es impedimento para que el equipo vuelva a luchar por el play off de ascenso; ahora luce su segunda mejor puntuación histórica en Segunda B

play off

En ocasiones, quizá se cree en una relación excesivamente estrecha entre la consecución de éxitos y el potencial económico. Bien es cierto que mientras menos limitaciones existen en el segundo aspecto más posibilidades se pueden tener para alcanzar lo primero, sobre todo porque hay opciones en el mercado que para otros resultan cuasi imposibles o más complicadas de manejar. Sin embargo, como se suele decir, el dinero no ofrece la felicidad, al menos no lo garantiza siempre. Un buen ejemplo en ese sentido es el que ofrece el Lucena temporada tras temporada desde que la Junta Gestora se hiciera cargo del club allá por el verano de 2010. Entonces se salvó una situación cuyo final parecía iba a ser el peor de todos, la desaparición; ahora, la entidad logra aliviar sus cuentas y al mismo tiempo competir por lo máximo en un Grupo IV de Segunda B en que ya comienza a tener cierto rango entre sus rivales.

La última muestra de que la época de los dispendios terminó en el citado verano de 2010, se dio en el recientemente cerrado mercado invernal, donde se fichó dentro de las posibilidades existentes. Una vez más, no se gastó más de los que se debía ni en algo que no contentara. Y así llegaron sólo dos incorporaciones, el guardameta Sergio Sanz y el centrocampista Gato, para dejar la plantilla que dirige Falete con apenas 17 efectivos. Aunque también cuenta la participación de jugadores del segundo equipo, como son los casos de Jalao o Pedro Caballero. A pesar de vivir esas circunstancias, el Lucena consigue estar por tercera temporada consecutiva en la lucha por disputar un play off que jugó en las dos anteriores. Es decir, es el fiel reflejo del trabajo bien hecho. Ocurre, además, después de atravesar una dinámica un tanto negativa. No en vano, se despidió de 2013 con sólo un triunfo en seis encuentros.

Con apenas cinco puntos de 18 posibles se despidieron del pasado año los celestes, que abrieron el presente con un triunfo apurado y sin demasiadas buenas sensaciones ante el Sevilla Atlético y con una goleada recibida en Cartagena. Tras aquel tropiezo hubo reacción y el cuadro aracelitano encadena tres victorias consecutivas, la última con festival anotador incluido. De esta forma, los lucentinos consiguen estar metidos nuevamente en la pugna por un play off que queda a un punto y que está al alcance inmediato, puesto que el próximo domingo visita al actual cuarto clasificado, un Cádiz que no vive su mejor momento. Se mantiene en tan buena situación el Lucena gracias a la que es su segunda mejor puntuación desde la temporada 2010-11, en que inició su andadura con la Junta Gestora al frente y con Falete y Juani en el banquillo.

Los 40 puntos con que se encuentra el conjunto celeste al paso de la vigesimocuarta jornada superan los cosechados la pasada campaña, sin ir más lejos, en el mismo momento del campeonato. En la 2012-13, a estas alturas, el cuadro lucentino sumaba cuatro puntos menos que en la actual (36), que a su vez eran tres más que en la 2010-11, en que contaba con 33. Las cifras del presente curso sólo se ven mejoradas por la que fue y es mejor temporada del Lucena en Segunda B -desde la 2007-08-, la 2011-12. Tras 24 fechas el equipo dirigido por Falete había cosechado 44 puntos. Por tanto, existe una razón más para creer en la opción de jugar el play off mientras se demuestra que el trabajo suele ser más importante que el dinero.