Una de cal y otra de arena en Segunda División B

La última jornada regular del año y una de las más importantes de toda la temporada, por todo lo que significa, sobre todo si se tiene en cuenta el parón que existirá en distintas disciplinas deportivas, como el fútbol sala. Dentro de este deporte, hay clubes cordobeses más allá de la representación que ejerce el Córdoba Patrimonio de la Humanidad en Primera División, máxima categoría a nivel nacional. Y es que tanto su filial como el Bujalance FS compiten en el Grupo V de Segunda División B y han pisado el parqué este pasado sábado por última vez en este 2023.

Por un lado, el conjunto bujalanceño cerró el año natural viajando hasta Coín y enfrentarse al Coineña, un equipo que ocupa las últimas posiciones de la clasificación y que solo había ganado un duelo hasta la fecha, por lo que era una oportunidad clara para los chicos de Fermín Hidalgo. De hecho, esto no fue desaprovechado por un Bujalance FS que consiguió endosarle un 1-11 a su rival, dando un paso al frente en la tabla clasificatoria y presentando su candidatura a la lucha por los cinco primeros puestos que otorgan o play off de ascenso o una plaza en la próxima edición de la Copa del Rey.

Por su parte, el filial del Córdoba Patrimonio de la Humanidad se deshace a una sola jornada de terminar la primera vuelta del campeonato regular. La escuadra blanquiverde también tenía una oportunidad clara ante un Sima Granada que estaba inmerso en una profunda depresión merced a cuatro derrotas consecutivas y cinco jornadas sin conocer la victoria. Por tanto, las puertas del Palacio Municipal de Vista Alegre se volvían a abrir, pero, esta vez, vio con el Córdoba Patrimonio B cayó de manera clara ante un plantel granadino que fue dueño y senior del choque de principio a fin.