El enigma Javi Lara

Apenas un par de días después todo comienza a quedar atrás. Una vez disputado el último partido, sólo un puñado de horas, menos de 48, es suficiente para que el curso pertenezca ya al pasado. Pero sigue presente en una dirección: el análisis detallado de la temporada es necesario para encarar la planificación de la próxima. Sobre todo y principalmente en lo que se refiere a la confección de la plantilla. En ese sentido, el Córdoba trabaja desde hace algunas semanas. Los primeros pasos los da el club en materia de renovaciones, un aspecto en el que tiene un objetivo prioritario: sellar la continuidad de Javi Lara. El montoreño es uno de esos futbolistas capaces de marcar diferencias en Segunda A, tal y como demuestra cada año que pisa el verde en la categoría. El centrocampista es además uno de los hombres más destacados del conjunto blanquiverde después de una difícil campaña, y eso que sólo tiene en su hoja de servicios medio ejercicio. Si bien en un principio todo pareciera resultar encaminado hacia su nueva vinculación, en la actualidad su futuro es una incógnita.

“Y se acaba otra temporada más de fútbol, siempre agradecido y afortunado por dedicarme a lo que me gusta. Y más en esta ocasión, que me ha tocado jugar en el equipo de mi tierra en una segunda vuelta muy dura con buenos y malos momentos”, expresó el jugador natural de Montoro en un texto publicado en sus redes sociales. Un mensaje de satisfacción en el que destacó haberse “sacado esa espina que llevaba muy dentro por no haber podido jugar” en su hogar y el hecho de haber recibido “muchas muestras de cariño que nunca se olvidarán”. Sin embargo, Javi Lara dejó una puerta abierta a la posibilidad de no seguir con la blanquiverde. El centrocampista no volverá a India. Al menos eso sobresalió de un comentario en Twitter realizado en Calcuta -el jugador militó en el Atlético Kolkata-. Ese hecho invitó a pensar que su renovación estaba más próxima, pero todo continúa en el aire. “Ahora toca descansar, desconectar y elegir lo mejor para el futuro”, concluyó su breve carta el montoreño.

Toca por tanto aguardar a los próximos días y quizá las venideras semanas para saber qué sucede finalmente con un futbolista que el pasado mercado de invierno consiguió cumplir un anhelo. Javi Lara abandonó el Córdoba muy joven y sin la ocasión de debutar con el primer equipo. Cesiones varias después, entre ellas al Villanueva en Segunda B, salió definitivamente de la entidad califal para dar forma a una interesante trayectoria en la que encontró la cima hace tres temporadas. Porque en la 2014-15, la campaña en la que precisamente el conjunto blanquiverde jugaba en Primera después de más de cuatro décadas, se estrenó en la elite con el Éibar. Disputó más de treinta encuentros y fue un jugador importante en tierras guipuzcoanas. Entonces llevaba ya unos años a la espera de recibir una llamada que no le llegó hasta enero de este 2017. A lo largo de su carrera jamás vistió dos cursos seguidos la misma camiseta, un dato curioso si se tiene en cuenta que casi siempre, a excepción de su experiencia en Elche, fue efectivo valorado.

Más de una década después de dejar atrás El Arcángel regresó. Lo hizo con una más que amplia sonrisa y después de consagrarse en el fútbol indio. En el momento de su presentación todos intuían que Javi Lara podía ser un futbolista importante en la segunda vuelta. Y así fue. Después de disputar sus primeros minutos el montoreño jamás perdió ya la titularidad, situación en la que poco a poco fue a más para terminar por convertirse en uno de los hombres más destacados del equipo que dirige Luis Miguel Carrión. Cumplido su anhelo y acabada la temporada se abre un período de duda en el que la totalidad de las miradas se dirigen especialmente a su figura. La afición desea que el centrocampista siga en El Arcángel, donde es visto como una de las piedras angulares del nuevo proyecto. También el club quiere contar con él. Pero la decisión depende del jugador, que visto lo visto, aún no tiene nada decidido. Su renovación a día de hoy es, por tanto, un enigma.