El discreto retorno de Emilio Vega
El fútbol como la vida depara en no pocas ocasiones situaciones más que curiosas. De ejemplo sirva la que se va a producir el sábado en El Arcángel. El coliseo ribereño es escenario entonces de una nueva final para el Córdoba, que en este caso recibe a un Huesca metido de lleno en una realidad muy diferente. El conjunto aragonés busca el ascenso a Primera mientras el blanquiverde trata de escapar del descenso a Segunda B. Trayectorias opuestas esta temporada las que viven ambos equipos, que tienen un nexo más allá del de su propia historia común. Éste tiene nombre propio, y es el de Emilio Vega. El ex director deportivo de la entidad califal regresa ahora como jefe de la parcela técnica del cuadro azulgrana, y por tanto como artífice de la positiva campaña que realiza el equipo de Rubi. Su discreto retorno, por si fuera poco, tiene lugar con un club, el cordobesista, profundamente renovado poco más de un año después de su salida.
La nota anecdótica del crucial duelo del sábado (16:00), que también lo es para el Huesca, la pone precisamente la vuelta a El Arcángel del leonés. El del Bierzo ejerce ahora de director deportivo en un conjunto que llamara a sus puertas apenas pasados unos días de su destitución en el Córdoba. Ocurrió en febrero, cuando el 21 la entidad califal anunció la salida anticipada de Emilio Vega. Su despido fue la justificación que la anterior propiedad del club encontrara a la mala campaña del equipo, dirigido por Luis Miguel Carrión tras cerrarse el ciclo de José Luis Oltra en el banquillo. Los blanquiverdes luchaban entonces por huir del descenso. Poco duró en la cola del paro el hombre que precisamente diera forma al plantel cordobesista que logró el ascenso a Segunda A en 2007. Aquel salto de categoría se dio, en efecto, en el estadio que ahora es su hogar: El Alcoraz. El Huesca le contrató sólo una semana después de marcharse del coliseo ribereño.
Fue en junio de hace once años cuando el Córdoba y el Huesca quedaron ligados por siempre. La razón, una final de fase de ascenso en la que el cuadro califal se impuso con Emilio Vega como director deportivo ante el rival que ahora para el berciano no lo es. El encuentro histórico entre las dos entidades prosigue más intensamente si cabe desde que el de León firmara por la de El Alcoraz. Este hecho provoca que en apenas un día el exblanquiverde visite El Arcángel en el bando contrario. Lo va a hacer para ver a un club del que casi nada queda desde que saliera. La propiedad, la presidencia y el Consejo de Administración, la dirección técnica… Todo cambió tras la operación de compraventa que sellaron Jesús León y Carlos González el pasado mes de enero. El dueño y el rector del cuadro cordobesista son otros, uno diferente en realidad pues ambos cargos los ocupa el empresario montoreño.
Con el traspaso de poderes se produjo una remodelación profunda que trajo consigo la aparición de un nuevo jefe en la parcela deportiva. Es Luis Oliver quien hoy tiene el rol que en su día desempeñara Emilio Vega. Del mismo modo, Luis Miguel Carrión cayó en el olvido tras su destitución en la décima jornada de este curso. El catalán relevó a Oltra con el berciano todavía en los despachos de El Arcángel. Incluso uno de sus sustitutos tampoco sigue: Jorge Romero. Mientras, la plantilla varió de tal forma que de aquellos jugadores a los que contrató sólo unos pocos quedan en el vestuario. Kieszek, Caro, Edu Ramos, Álex Vallejo, Aguza, Javi Lara, Javi Galán y Alfaro son los supervivientes del Córdoba del que formó parte el de León.
0