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Adesal y CBM tropiezan en el inicio de sus fases de ascenso

Lance de un encuentro del Adesal

Cristian López

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Ilusión máxima, dificultad total. El Adesal ha comenzado este viernes la fase definitiva de ascenso a la Liga Iberdrola, donde se está viendo las caras nada menos que con los equipos campeones de la División de Honor Oro, es decir, de una categoría superior a la suya, en busca de una plaza en otra dos veces por encima. Una auténtica hazaña en la que las fuensantinas han acariciado la sorpresa con las yemas de los dedos en la primera jornada. El Cicar Lanzarote Ciudad de Tenerife era el primer rival a batir para las fuensantinas, que pecaron de un exceso de nerviosismo en los primeros minutos, lo cual ya deparó en un primer parcial de 4-0, y que se amplió hasta el 6-1.

Ese dominio de las isleñas fue total durante la primera mitad, en la que el Adesal comenzó a carburar ofensivamente de la mano de jugadoras como Lucía Vacas o Andrea Roda, aunque siempre con diferencias que superaban los tres tantos. Es más, al vestuario se marcharon ambos conjuntos con un 14-9.

Tras el paso por vestuarios seguiría la misma dinámica, con el equipo de Lanzarote alcanzando otra vez ventajas de entre cinco y seis goles. Situación muy delicada para las cordobesas y que ya les hizo ir siempre a remolque, ante un equipo ofensivamente muy coral. Con todo, en el tramo final, las de Moreno buscaron una última reacción y se pasó en apenas diez minutos del 25-19 al 28-25. Sin embargo, el intento de remontada quedó ahí tras otro empujón de las locales, con lo que el duelo se resolvió con 30-26.

El CBM roza el triunfo ante el Amenábar (40-39)

Vibrante encuentro el que han disputado el Cajasur CBM y el Amenábar Zarautz en el estreno de la ronda de promoción a Plata masculina. Un choque marcado por el acierto ofensivo desde el primer momento, y en el que ambos conjuntos llevaron la iniciativa en el marcador de manera intermitente. A cada golpe de uno, respondía inmediatamente el otro. De hecho, las alternancias eran continuas, aunque al descanso fueron los de Guipúzcoa los que mandaban por un ajustado 19-18.

Tras la pausa todo se mantuvo igual. Juanlu Moyano fue el mejor en las filas del cuadro de Jesús Escribano. Eso sí, los vascos pusieron la directa en el tramo final, llegando a obtener las mayores ventajas de todo el encuentro. Es más, a falta de apenas cinco minutos ganaban por tres goles. El CBM quiso buscar la heroica y se puso a un solo gol, pero ya no pudo recortar más la diferencia (40-39).

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