Los cinco pasos para reconocer que uno es 'Innormal'

El poeta Carlos Miguel Cortés presenta su segundo libro en el café Málaga

Innormal (Destino, 2016) no es un libro normal, como su propio nombre indica. Obra del poeta Carlos Miguel Cortés. “Es un libro de poemas y de prosa poética, micropoemas y algún relato que, todo mezclado y agitado busca estar cargado de sentimientos y de historias”. Tanto el primer libro como éste tienen títulos formados por palabras inventadas por el autor. El primero fue Intranerso y el segundo Innormal -hace referencia a la incapacidad absoluta de ser normal- se presentó anoche en el Café Málaga.

“No es que sea una afición de inventar palabras, creo que todavía quedan muchas cosas en el mundo por inventar y creo que es bonito ponerle nombre a cosas y conceptos que todavía no lo tienen”, explica el autor quien reconoce que sufre de esa misma innormalidad. “El libro es una especie de viaje que está dividido en cinco capítulos que hacen referencia a las cinco fases del duelo y que en el libro se convierte en las cinco fases para aceptar la innormalidad y por las que yo también tuve que pasar para aceptar que era innormal”.

Cortés cree que leyendo su segundo libro queda patente una evolución con respecto al anterior. “Al fin y al cabo es poesía y siempre tiene que notarse que vamos cambiando y avanzando porque los que escribimos poesía hablamos mucho de nosotros mismos y todos vamos cambiando. Con lo cual se acaba plasmando en el papel”.

La presencia de la prosa en los libros de Cortés siempre está presente. Ajeno a las etiquetas literarias y poco amigo catalogar qué es prosa y qué poesía, el escritor no descarta algún día enfrentarse a una novela. “Pero la verdad es que no tengo prisa, estoy seguro de que lo haré pero no es algo que lo tenga como un propósito pendiente más elevado”.

Mientras eso ocurre, Carlos Miguel Cortés sigue jugando en Twitter. “No sé si soy un tuitero de los buenos, pero de lo viejos seguro que sí porque llevo ya nueve años en esa red social”, reconoce. “Y después de nueve años sigue dando juego, de manera sorprendente. Es cierto que Twitter ha cambiado mucho la forma de hablar con la gente, de tuitear incluso. Y eso ayuda a que no se vuelva algo aburrido”.

En los dos libros publicados quedan trazos de esos juegos en Internet. “Porque Twitter te permite hacer una cosa muy divertida que es probar si algo funciona o no. Pones de repente un verso que se te acaba de ocurrir y en seguida ves cómo reacciona la gente y si le gusta o no”