La Universidad de la Frontera nace para resistir a los recortes
La plataforma impulsada por estudiantes y profesores de Derecho se presenta en plena ola de protestas por la reforma educativa del Gobierno
En la puerta de la Facultad de Derecho, una imagen inusual. Varios alumnos y profesores sostienen cintas de las que se usan para separar espacios, por ejemplo en las obras, por ejemplo, en las fronteras y sus cordones policiales. De ellos, cuelgan siluetas de personas perfiladas en plásticos trasparentes. Escritos en ellos, casos reales de alumnos que se han visto afectados por los recortes impuestos por la reforma del ministro de Educación José Ignacio Wert, que endurecen las condiciones para optar a una beca. Así se ha presentado la plataforma Universidad de la Frontera (UF!).
“Estas imágenes simbolizan a los alumnos que por la pobreza y por las políticas de tasas se quedan desplazados, al otro lado de la frontera, fuera de las universidades, sin plaza para poder estudiar”, explicaba Antonio Manuel Rodríguez, profesor de la Facultad y uno de los impulsores de la plataforma. “Lo que es peor, simbolizan también a aquellos estudiantes que a pesar de haber conseguido una beca de estudios no pueden matricularse porque viven en pueblos o en otras ciudades y han quedado excluidos de la beca de transporte”, prosigue.
Según la nueva política impuesta por el Gobierno a las universidades, la nota mínima para optar a una beca de estudios general es el 5,5. Pero si el alumno necesita desplazarse al campus desde otra ciudad u otro pueblo, el Gobierno exige que su nota supere el 6,5 de media en el expediente.
“Este es un sistema perverso que deja fuera a muchísima gente”, se quejaba Rodríguez. “También a aquellos alumnos que no se matriculan de todas las asignaturas. Como la media se hace entre todo el currículo del año, aunque hayas aprobado todas las asignaturas que cursabas puede que no tengas beca”, proseguía.
Para la plataforma UF! estos miles de casos de estudiantes que abandonan sus carreras por el endurecimiento en la gestión de las becas y la subida de las tasas universitarias son tan transparentes para administración como los muñecos que simbólicamente han colgado de la fachada. Por eso, UF! aspira a ser un colectivo abierto, que trascienda los muros de la Facultad de Derecho y acoja a estudiantes, profesores y resto de trabajadores de la Universidad en una demanda que, subrayan, se da en todo el país.
Una demanda que explica de manera sencilla, María del Carmen Bernal, alumna de 21 años de la facultad de Derecho que no sabe si podrá seguir estudiando porque ha perdido su beca al no alcanzar el 5,5 de media. “He pagado los primeros 600 euros, pero todavía me queda pagar 700 y no sé si podré hacerlo”, confesaba.
Mientras tanto, hoy ha proseguido la huelga de estudiantes que, como la de ayer, sirve de prólogo a la huelga general convocada para mañana y que culminará con una manifestación que saldrá a las siete de la tarde de la Glorieta de las Tres Culturas.
0