Mil kilómetros en bici para concienciar sobre los tumores cerebrales pediátricos

El próximo 3 de junio, Javier Rodríguez y Nicolás Zúñiga partirán de Córdoba para recorrer en bicicleta, durante los siguientes diez días, los mil kilómetros que hay hasta Santiago de Compostela. La iniciativa, llamada ‘Kilómetros de Esperanza’, busca concienciar sobre los tumores cerebrales pediátricos y atraer fondos para la investigación. Y cuenta con la participación del hospital Reina Sofía y el Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (Imibic).

Rodríguez es padre de Javier, un adolescente de trece años que recibe tratamiento en el hospital Reina Sofía por un tumor cerebral. Zúñiga, por su parte, es enfermero de la unidad de Oncohematología Pediátrica del Hospital Reina Sofía. Durante el viaje, contarán con el apoyo de dos personas, una enfermera y otra persona que conducirá la autocaravana que los acompañará en el trayecto.

La idea surgió, según ha contado Zúñiga en la presentación de la iniciativa, cuando Rodríguez le transmitió su deseo de hacer el Camino de Santiago, pero no se materializó porque Javier recibió el alta del hospital. Sin embargo, tras un nuevo ingreso, “me lo propuso nuevamente y yo le dije que me liaba la manta a la cabeza y lo acompañaba”, ha relatado.

Además, Zúñiga ha señalado que el objetivo de la iniciativa es concienciar, pero también recaudar fondos para la investigación de este tipo de tumores, “que sigue siendo importantísimo”. Y se ha mostrado agradecido por la respuesta de las cerca de cuarenta empresas, colectivos e instituciones que han apoyado el proyecto.

El director gerente del hospital Reina Sofía, Francisco Triviño, ha explicado que el objetivo de esta marcha es “sensibilizar a la población de Córdoba de un problema de salud grave como es el cáncer infantil, centrado en esta vez en los tumores cerebrales de la infancia y de la adolescencia”. Y ha señalado que esta iniciativa “pone de manifiesto una vez más el compromiso y la solidaridad que emana de la ciudadanía de Córdoba.

Por otro lado, Raúl López, investigador del Imibic, ha explicado que existen muy pocos estudios sobre este tipo de tumores en niños y adolescentes, “por las dificultades éticas y porque es difícil desde un punto de vista personal para la familia”.

Además, ha asegurado que los tumores cerebrales “son muy complicados desde un punto de vista genético y molecular”, y que, desde el Imibic, están buscando “biomarcadores que puedan ayudar a estos a estos niños”. “Sobre todo, nuevas terapias porque ahora mismo las que hay disponibles para niños son muy duras”, ha señalado.

Finalmente, el jefe de servicio de neurocirugía del hospital Reina Sofía, Juan Solivera, ha declarado que se trata de una iniciativa “fantástica”, porque “los tumores cerebrales infantiles tienen una baja incidencia y es fundamental visibilizarlos”.

“En este contexto es fundamental que hagamos actividades colaborativas entre el hospital y el Imibic”, ha asegurado Solivera, “a través de los proyectos de investigación que estamos llevando a cabo con el objeto de encontrar nuevas terapias que sean más efectivas que las que tenemos hoy en día”.

Además, ha pedido que las autoridades potencien la investigación para mejorar la calidad de vida de los pacientes. “Nos hace falta mucho dinero para investigar estos tumores”, ha añadido.