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Piden tres años por amenazar en foros fascistas a un exagente de futbolistas

Pintada de corte fascista en una calle de Córdoba | MADERO CUBERO

Manuel J. Albert

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El Juzgado de lo Penal 1 de Córdoba celebró este lunes la vista contra un segundo acusado de amenazar en foros fascistas de Internet a un exagente de jugadores de la Federación Española de Fútbol, su pareja y la hermana de éste. Por estos mismos hechos ya fue condenado en 2015 un amigo del enjuiciado al que se le impusieron tres años de prisión y el pago de una multa de 200.000 euros a la víctima principal, 30.000 a la pareja y 12.000 a la hermana. Se trata de la misma pena que solicita ahora el Ministerio Fiscal.

El acusado se encontraba en busca y captura desde la instrucción del caso y no había comparecido en la vista del anterior juicio. En aquella ocasión, el preso ya condenado incriminó al enjuiciado en la redacción y envío de buena parte de las amenazas. Este lunes el acusado ha negado todos los hechos y ha afirmado que su identidad en las redes sociales digitales, en los foros y en los correos electrónicos fue suplantada por alguien.

Los hechos que han sido enjuiciados se produjeron entre el 30 de noviembre de 2008 y el 11 de febrero de 2010. Durante ese tiempo, el fiscal sostiene que los dos acusados -el ya condenado y el ahora enjuiciado- sometieron a M. P. a un acoso implacable a través de los foros sociales de Internet y de correos electrónicos. “Valiéndose de las páginas webs, entre otras europans.org, nordpress.com, putalocura.com y youtube.com, ha venido difundiendo imágenes manipuladas de M. P., mediante fotomontajes de contenido sexual, nazista y similares (…), cuyo objetivo era claramente difamatorio, atentando a la dignidad, el honor y la integridad moral de [la víctima], provocando el descrédito público del mismo”, destacó la primera sentencia condenatoria.

Según reconoció el anterior condenado, todo comenzó después de ser expulsado de un foro nazi en el que participaba con su futura víctima, M. P. El agresor pensó que éste estaba detrás de la expulsión. Entonces, recogió la sentencia, “comienza a realizar de forma torticera comentarios insultantes, amenazantes, desde su cuenta de correo”.

La sentencia añadió que parte de la campaña difamatoria del condenado se basó en artículos de prensa que encontró en Internet. Como uno referido a un supuesto complot de extrema derecha para desestabilizar el país, publicado en 1989 por un periódico de tirada nacional. En el mismo, alguien con los mismos nombres y apellidos de la víctima, exdirigente de Fuerza Nueva y vinculado al grupo ultra CEDADE, es detenido por estos hechos, además de por poseer estupefacientes.

Entre las perlas cultivadas que vertió durante años el condenado, el documento judicial recoge varias. “A mí nadie se me escapa, aunque tarde 6 largos años en cazarlo”. O “tú lo que eres es un payaso infrahumano al cual me gustaría conocerlo en persona y pagaría por él. Pagaría para que me dejaran a solas contigo cinco minutos, sin armas y sin testigos, solo tú y yo. Entonces ibas a conocer el miedo, el dolor y la sumisión, viejo podrido y acabado, que me he meado en tu puta cara de panoli con bigotito delante de todo el mundo. Y el día que no tenga nada que perder, sencillamente me apetezca liarla gorda, ya se dónde tengo que acudir y por quién preguntar”.

La mayoría de las imágenes que describen los mensajes son de una violencia extrema contra la víctima y su entorno. Y en un volumen que sorprendió incluso al propio magistrado que redactó la primera sentencia, quien señaló que no iba a seguir reproduciendo mensajes “dada la numerosísima documental que en tal sentido” aparece en el sumario del caso. Todo ese cúmulo de salvajes misivas sirvió como prueba para terminar condenando a M. M. y ahora pesa sobre el segundo acusado. “Tenemos suficiente prueba documental como para tener por desvirtuada la presunción de inocencia del acusado”, reconoció el juez en la anterior sentencia.

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