Los japoneses que querían ver Córdoba 'despacito'
Nace en Córdoba una empresa pensada para el turismo japonés llamada Caracol Tours, un nombre que es su auténtica declaración de intenciones
El japonés no es solo el turista que, armado con una cámara fotográfica, recorre a un ritmo infernal una ciudad cualquiera española, se sube en el autobús, come donde puede y se marcha a su país donde, cuando vea las imágenes que ha captado, no sabrá distinguir entre el Acueducto de Segovia y la Mezquita de Córdoba. Según Isabel Calvache, gerente de Caracol Tours, el japonés es un turista que lejos del tópico quiere hacer turismo de una forma distinta, relajada y, sobre todo, despacito.
Calvache presentó ayer en el patio de Rey Heredia 22 su empresa, Caracol Tours, que junto a su mascota Rafalito (un caracol, obviamente) es una auténtica declaración de intenciones de lo que persigue: explotar el slow tourism. En estos momentos, en España sólo hay una empresa de este tipo de turismo en Barcelona, a pesar de que la demanda empieza a ser alta sobre todo en países como Italia, Alemania, Canadá y Francia. “Quiero que la estancia en Córdoba tenga un ritmo diferente al que lleva a los japoneses a recorrer toda España en una semana y mi objetivo es conseguir que el viajero recuerde su estancia en nuestra tierra más allá de las fotos”, insistió la gerente durante la presentación.
Calvache detalló que, para ello, Caracol Tours trabaja con proveedores cordobeses “de calidad” con el objetivo de adaptar “la enorme oferta que hay en Córdoba” a este tipo de turismo, el japonés, que tiene un alto poder adquisitivo. “El japonés es un turista altamente exigente, pero también fiel y si conseguimos engancharlo seguirá visitando Córdoba”, resaltó la gerente, quien añadió que “el japonés es muy contemplativo, se ensimisma con una flor o un paisaje, perfecto para el turismo lento, un tipo de turismo con el que pretendemos que disfrute de Córdoba de tal manera que no la olvide y vuelva; por ejemplo, con algo tan simple como participando en la elaboración de un salmorejo”.
Además, añadió que Caracol Tours busca “algo esencial para Córdoba: promover el negocio local de calidad, desde el de los productores adscritos a nuestras denominaciones de origen, hasta el de los artesanos tradicionales o proveedores de alojamientos y restauración, así como el de todo tipo de servicios turísticos”.
Tanto el gerente de Consorcio Córdoba como la presidenta de la Asociación de Jóvenes Empresarios (AJE), Marisol Chacón, alabaron la apuesta de Calvache por un tipo de turismo distinto e innovador, “que puede suponer un nicho de mercado para el turismo de calidad en Córdoba”, apostilló Chacón.
Mientras que la cofundadora de Ohayoo –empresa consultora de marca para la internacionalización- Rosa Muñoz, gran conocedora del mercado japonés, aplaudió la iniciativa de Caracol Tours de unir turismo y gastronomía e incidió en que el proyecto de Calvache es la apertura de una puerta no sólo al turismo japonés en Córdoba sino también al asiático. “A día de hoy, la renta per cápita de Japón es seis veces mayor a la de China y todavía no hay una oferta del tipo que propone Caracol Tours para este tipo de turismo en un momento en el que el chino, el coreano y el vietnamita quieren parecerse al japonés”, incidió. Muñoz aplaudió la iniciativa de Caracol Tours de “especializarse en un tipo de cliente y diferenciarse, eligiendo un concepto como el slow que lo hace distinto al tipo de turismo que existe en la ciudad”.
0