Córdoba, provincia española con más 'pobreza anclada'

Córdoba es la provincia española con más pobreza anclada de España, según un informe de Air Group que acaba de hacer público. La pobreza anclada es el riesgo de pobreza, un medidor que usa la ONU para testar los movimientos de la población y su situación real. El riesgo de pobreza se consigue calculando el número de familias cuyos ingresos están por debajo de los ingresos medios de la población española.

Por provincias, la tasa de pobreza anclada más alta se da en Córdoba, donde se observa un 45,2%. Es decir, un 6,5% más de población presenta empobrecimiento que si se considera el umbral de pobreza relativo que varía en base a los ingresos medios de cada año. Tras Córdoba hay otras 12 provincias con una pobreza anclada superior al 40%. Entre ellas están todas las andaluzas -salvo Málaga que presenta un 37,2%-, las extremeñas, las canarias, Murcia y Cuenca.

Sin embargo, Cáceres es la provincia que refleja una mayor diferencia entre el riesgo de pobreza de 2015 (28,2%) y la anclada (un 43,3%). “Es decir, un 15% más de personas estaría hoy residiendo en hogares que en 2009 se hubieran calificado en riesgo”, revela el estudio.

Navarra, las provincias vascas, las catalanas y Zaragoza son las que dentro de la pobreza anclada presentan las tasas más bajas. Todas ellas están por debajo del 20%.

El estudio de AIS también ha analizado la 'pobreza anclada' para 144 municipios de más de 50.000 habitantes, donde Sanlúcar de Barrameda es el que presenta una tasa más alta, un 46,7%. Le sigue Arona (Tenerife) con un 45,1% y Alcalá de Guadaira (Sevilla) con un 44,3%.

Pamplona, Getxo, San Sebastián y Barcelona, son los que presentan las tasas de pobreza anclada más bajas. Todos ellos por debajo del 15%.

AUMENTA LA 'POBREZA ANCLADA' EN TODAS LAS CCAA

Desde 2009 el nivel medio de ingresos por hogar ha caído en todas las comunidades autónomas, siendo Andalucía la que más ha acuciado la bajada, llegando al 25%. Le siguen Murcia (24,3%) y Cantabria (23,5%).

Así, el volumen de población en riesgo de pobreza calculado en base al umbral de 'pobreza anclado' a 2009 alcanza tasas más altas en todas las comunidades autónomas, pero el mayor empobrecimiento se da en Extremadura. En esta región la tasa se sitúa en el 43,3%. También las comunidades murciana, canaria y andaluza pasan del 40% de tasa de población en riesgo de pobreza. En el otro extremo están navarros y vascos, cuya tasa no alcanza el 15%.

El nivel medio de renta de los españoles ha descendido un 15,2% desde 2009 y la población en riesgo de pobreza en 2015 era del 22,1%, según datos del INE. Sin embargo, el riesgo de pobreza aumentaría seis puntos si el nivel medio de renta se hubiera mantenido estable desde la crisis, según un informe de AIS Group, es decir, “las familias españolas son más pobres económicamente y la tasa de pobreza real se ha incrementado”, afirma a Europa Press Agustí Amorós, director de desarrollo de negocio de la consultora.

Según los datos del INE, en 2015 la población que estaba en riesgo de pobreza era del 22,1% y el nivel medio de renta de los españoles era de 26.092, un 15,2% menos que en 2009.

“Si los sueldos bajan y, por lo tanto, baja la media de los ingresos de las familias españolas, el 60% de los ingresos de esta media disminuye y, por lo tanto, habrá menos familias en riesgo de pobreza relativa, no absoluta--, explica Agustí Amorós, director de desarrollo de negocio de AIS Group--. Con este estudio queríamos saber qué hubiera pasado si los sueldos, teniendo en cuenta la inflación, se hubieran mantenido desde 2009”. Para ello, el estudio ha utilizado el indicador de 'pobreza anclada'.

La respuesta es contundente: “Las familias españolas son más pobres económicamente y la tasa de pobreza se ha incrementado”, afirma Amorós, ya que si la tasa de población en riesgo de pobreza en 2015 era del 22,1%, según los datos el INE, considerando el indicador de 'pobreza anclada' a 2009, dicha tasa alcanza el 28,02%.

Así, la 'pobreza anclada' observa las variaciones en la tasa de pobreza de la población dejando fijo el umbral de pobreza de 2009, actualizándolo con la variación del IPC de cada año. “De este modo, puede comprobarse cómo evoluciona el porcentaje de población en riesgo de pobreza a lo largo del tiempo bajo un mismo umbral, lo que da una idea menos relativa o variable de la situación”, explica Amorós.