Javier Jiménez (Córdoba 1976) es un empresario cordobés con más de 25 años de experiencia en los que ha iniciado proyectos de todo tipo en diferentes sectores. Futurista empedernido y adicto a la búsqueda y desarrollo de oportunidades y alianzas estratégicas tanto en el ámbito nacional como internacional. Un líder creativo y optimista con excelentes habilidades para el desarrollo de productos innovadores y mercados basados en tecnología. Actualmente dirige la empresa Grayhats en la que hace consultoría estratégica y de ciberseguridad.
El bono digital. Digitalización de supermercado
Ya hablamos en este artículo que lo de los fondos europeos para recuperar España, iban a ser un mamoneo. Por un lado está la extrema burocratización de la administración española, la cual, hace prácticamente imposible gestionar algo en tiempo y forma. Esta burocratización, emponzoñada por ese sentimiento muy español de “aquí son todos unos delincuentes que vienen a robar”. Y por otro, que España siempre será España y cuando alguien roba, roba a lo grande.
La cuestión de fondo es que España no tiene la capacidad de gestionar fondos europeos ( y lo saben ) y mucho menos al nivel necesario para estos permeabilizen a las capas de la pequeña y mediana empresa que son en muchos casos a las que Europa dice que van dirigidos. Por este motivo era de esperar que se buscaran atajos para gastar y acabar dándoles la pasta a las empresas de siempre.
Estas “Grandes Digitalizadoras” ( Las “telefónicas” y grandes consultoras repletas de k-workers* en las que las telefónicas han hecho outsourcing de gran parte de su personal) ya se encargarán de permeabilizar subcontratando a pymes del sector digital para que hagan el trabajo a precio de galera romana, o en el más probable de los casos, contratando y quitándoles a su personal. Os cuento como va esto de las ayudas a la digitalización y a ver si íbamos desencaminados.
Recientemente se han publicado en el BOE las bases para que las micro y las pymes, tal vez el segmento más complejo de digitalizar, accedan a unas ayudas para la tan necesaria digitalización para la mejora de la competitividad de sus negocios.
Esto de saber qué significa exactamente la digitalización da para mucho, pero por simplificar, bajo la óptica del gobierno español va de; usted vende fruta en la esquina de su calle, bien, monte una tienda online y entre en el siglo XXI por la puerta grande! Para eso le doy 2.000€. Tiene problemas de ciberseguridad? Le doy 100€ para un antivirus! Y voilá, aquí ahora quien no se digitalice es porque no quiere. Por supuesto y como no se podía esperar menos, un planteamiento inicial completamente erróneo. Pero como siempre, el diablo está en los detalles y la fiesta empieza ahora.
El gobierno no quiere que le acusen de volver a darle la pasta a los mismos, a los de siempre, por lo que se ha esmerado en hacer un poco de teatro. Ha introducido la figura del “Agente Digitalizador”, supuestamente una pyme del sector TIC cuya labor en principio parecía que sería la de ser la última milla y trabajar con los prospectos a digitalizar. Eso es lo que parecía.
Digitalizadores no, Distribuidores
En las bases se especifica qué es lo que está subvencionado y qué no, en la mayoría de los casos son licencias y suscripciones de software, por lo que el “agente digitalizador” pasa a cumplir más una función de distribuidor e implantador que de consultor. “No te preocupes digitalizador en el Ministerio ya pensamos por tí y sabemos lo que al digitalizado le conviene”.
Digitalizadores no, Financiadores
En su artículo 23 también se especifica que “el digitalizado cede el derecho a cobro de la subvención al agente digitalizador”, este la cobrará después de prestar el servicio, establecido a 1 año, y después de su debida justificación. Pausa dramática . ¿Agentes digitalizadores o agentes financiadores? ¿Un agente puede digitalizar tanto como su CIRBE le permita?. En las bases se indica que nadie se ponga nervioso que los agentes se pueden financiar mediante créditos ICO . De juzgado de guardia.
Sabemos qué empresas tienen mucho músculo financiero y oficinas técnicas como para justificar un ordenador cuántico para una charcutería. Si querían que fuesen ellos los destinatarios del dinero, de verdad había que marear tanto?
Lo que tampoco entiendo es, si el dinero viene de Europa, ¿por qué el gobierno en vez de darlo retrasa un año y medio mínimo su disposición? ¿Tiene problemas de liquidez el gobierno con el chorro de millones que están entrando? Cualquier respuesta a esta pregunta me parece terrorífica.
Digitalización de supermercado
Lo peor de todo esto no es lo comentado hasta ahora ya que son males que afectan a los digitalizadores y no a los digitalizados que son los que en realidad tienen el problema a resolver.
Una digitalización es válida sólo si aporta algún valor al digitalizado y esto no va de poner parches de 2.000 euros. Una buena digitalización cuesta mucho más dinero y aporta muchísimo más valor que lo que cuesta. Un chollo, si la digitalización es buena y el digitalizado lo entiende. Llevo muchos años contando a mis clientes que una negocio online cuesta mínimo una inversión inicial de 30.000 euros ( plataforma de comercio online, plan de marketing digital, imagen corporativa digital, redacción de descipciones comerciales de productos, fotografía de producto para catálogo online, publicidad online.. etc) y muchísimo trabajo por parte del promotor del negocio.
En la mayoría de los casos, una pequeña reforma y poner los muebles de un negocio situado en una calle de barrio periférico de una ciudad mediana vale más, y aquí estamos hablando de un negocio que puede vender en toda España o incluso Europa o el mundo. ¿Os parece caro? Si quieren un negocio online que pueda competir ( con un tal Amazon por ejemplo ) y vender a un nivel como para que merezca la pena tenerlo, 30.000€ yo lo veo muy barato.
Pero ahora llega el ministerio y saca algo que se llama el “bono digital” que provisiona 2.000€, que ni siquiera el digitalizado tiene que pelear ni justificar, y de alguna forma le da a entender que con eso va a tener un negocio online. En ningún sitio de la bases se le pide como requisito el 90% de cofinanciación para acometer el proyecto. Eso sería lo correcto y lo que informaría al digitalizado sobre la naturaleza del viaje que está a punto de emprender.
En conclusión, el “bono digital” me parece la enésima muestra del chapucismo de siempre, perpetrado por los de siempre, con las víctimas de siempre y los beneficiados de siempre. Pero vamos que esto es España, y aquí mientras no reviente la cosa, a seguir dándole de hostias al muñequito.
*Un k-worker es una persona que dedica gran parte de su jornada laboral a reflexionar y discutir sobre los k’s que cobra.
Sobre este blog
Javier Jiménez (Córdoba 1976) es un empresario cordobés con más de 25 años de experiencia en los que ha iniciado proyectos de todo tipo en diferentes sectores. Futurista empedernido y adicto a la búsqueda y desarrollo de oportunidades y alianzas estratégicas tanto en el ámbito nacional como internacional. Un líder creativo y optimista con excelentes habilidades para el desarrollo de productos innovadores y mercados basados en tecnología. Actualmente dirige la empresa Grayhats en la que hace consultoría estratégica y de ciberseguridad.
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