Las letrillas de Rafael Ruiz en el Diario Córdoba son pura ortodoxia de axerquía. Las espero cada semana. No he tratao con Rafael, aunque seguramente nos habremos echao alguna caña por lo arto en el Escape Room que formaban las collejas de Manolo, de gratis, con cada caña tirada, literalmente, en El Correo, la otra Academia centenaria de Córdoba. Hoy, visionando próximos carromatos humeantes de grasas en su correcta saturación mezclaos con los geranios del rebus festivo en el que la siudà ha convertido a nuestros moenia - para los antiguos, la dignidad de la estampa urbana de la ciudad -, nos deja lo de EmBellished: nueva D.O.P de todo lo que destila Capitulares en materia de abuso calórico del casco histórico.
Esta semana, hemos tenido meneo en nuestro foodtrack de las piedras. Congreso de Murallas en el Sentro de RV. Congreso sesudo de historia antigua en Veterinaria. Presentación de los resultados de la Ronda Norte, congreso telemático en Cadi, tertulias, comidas a medias, cafés fríos y no menores ni templados contubernios. Por el CRV y por la Casa Árabe había vecinos, no arqueólogos, vecinos, que se fueron de la cola del capitular carromato cuando leyeron esta semana en el ABC que la porquería de muros de la Ronda norte no son Medina Azahara: que sólo les queda la esperanza que como el viento al humo se aparten ya de mí.
A la política capitular en materia de piedras y escombros, le preocupa enseñarnos sin embargo la infancia y adolescencia del mundo egipcio en otra Magna, seguimos siendo hijos de Pompeyo que, a razón 1.2 millones de lereles, se celebrará en Córdoba en diciembre. Cómo podríamos vivir en Córdoba sin la infancia del mundo egipció, pordió, como tenemos nosotros el patio, a menos que Sinué fuera del Bailio. 42.500 euros ha sido el nuevo contrato para excavar 250m2 en la Ronda Norte. 1.175.905,28 euros era el presupuesto para restaurar el Salón Rico de Madinat Al Zahra. La mitad de eso, porque no había pa más, la renovación tipo escaleras de centro comercial del templo de la Calle Claudio Marcelo. Otro milloncejo, tapar la vergüenza del insendio-que-no-es-na-sirculen en la Mezquita, community managers y estrategia de lavado digital incluidos.
2.3 millones costó la primera Magna de esta trilogía, la exposición Córdoba y el Mediterráneo cristiano: cambio de era. Y nos falta la última, el año que viene, en el 2026, sobre la Córdoba Romana, ad Maiorem Gloriam. Piensen en el único arqueólogo glorioso de Córdoba que no critica al alcalde, últimamente. Doh y Doh cuatro y uno Sinco: Sinco Salones Ricos de Madinat Al Zahra nos cuesta la Salmorejistan Show Estarategy, dejando pal café los 20.812 euros la última excavación en Cercadilla.
Ayer, después de que San Pedro le cobrase las deudas a Santa Eulalia inundando su yacimiento de la Ronda Norte, se dispusieron como protección unos geotextiles de polipropileno y poliéster que, traducido en axerquiano del Realejo, no es más que un pañito sujetao con ladrillos calaos bien predispuestos para volcarse a la primera ventolera por el oeste. Vayan después de la siguiente lluvia a la Ronda Norte, verán para lo que sirven y verán los muros de tierra cruda como magdalenas mojás en el suelo como se tarden.
Sigan comprando la entrada en la taquilla del foodtrack capitular, les regalan un trozo de pastelón cordobéh. Y sigan entrando al chou. No fui a la primera, no iré a la segunda y no iré a la tercera. Siguen siendo más cordobeses los jaramagos y los geotextiles.
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