¿Quién necesita un seguro de vida?
La vida transcurre a una velocidad de vértigo. El ritmo acelerado de la sociedad, así como la presión del día a día, hace que la mayoría de las personas tengan dificultades para desconectar y disfrutar al máximo cada momento. Es fácil dar por sentado cada día y olvidar la fragilidad humana, pero la vida da muchas vueltas y puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Un buen ejemplo de ello es la pandemia de Covid-19. Por este motivo, no es de extrañar que los seguros de vida se hayan convertido en uno de los productos estrella de las compañías de seguros, ya que protegen a las personas y brindan tranquilidad a las familias ante una eventual situación adversa por el fallecimiento o la invalidez permanente absoluta del asegurado.
En total, más de 20 millones de personas tienen un seguro de vida en España, según los datos de la 'Memoria social del seguro 2021', elaborada por la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (UNESPA). Una cifra que ha aumentado considerablemente tras la crisis del coronavirus. No todo el mundo necesita contratar el mejor seguro de vida. Una forma de determinar si necesita o no un seguro de vida es considerar cuáles son sus obligaciones y contribuciones económicas y cuál sería el impacto de su fallecimiento o invalidez permanente absoluta en sus seres queridos. Estas son algunas de las personas que pueden necesitar contratar un seguro de vida:
Responsables de la economía familiar
La razón más habitual para contratar un seguro de vida es proteger a la familia, especialmente cuando el asegurado es la principal fuente de ingresos del núcleo familiar. Este tipo de póliza puede ayudar y proteger a los cónyuges, hijos u otras personas dependientes para que puedan hacer frente a los gastos tras la pérdida o disminución de los ingresos de la casa, en caso de fallecimiento o invalidez permanente absoluta.
Propietarios de pequeñas empresas
Los propietarios de pequeñas empresas necesitan un seguro de vida para asegurar la continuidad de su negocio o liberar de cargas a sus herederos, ya que la mayoría de los empresarios tienen alguna deuda contraída. El seguro de vida puede ayudar a los herederos a cubrir una amplia variedad de gastos, como comprar su parte de la empresa, contratar ayuda adicional o cubrir el alquiler del local.
Personas que tienen un préstamo o una hipoteca
El seguro de vida puede estar vinculado a un préstamo o hipoteca. Este tipo de póliza asegura el bienestar y tranquilidad de los seres queridos en caso de fallecimiento o invalidez permanente absoluta, ya que podrán contar con un capital para cubrir la liquidación de la deuda y no tendrán que asumirla.
Solteros sin hijos
Aunque suelen ser propensos a ignorar el seguro de vida, debido aque no suelen ser responsables de la economía familiar, los solteros sin hijos también pueden beneficiarse de este tipo de pólizas. No hay mejor momento que el presente para comenzar a prepararse para un futuro financiero seguro, especialmente si planea casarse y tener una familia algún día.
Personas mayores
Las personas mayores que se acercan a la jubilación o ya se han jubilado pueden pensar que no necesitan un seguro de vida. Sin embargo, el seguro de vida no tiene edad. Aunque es posible que muchas de sus responsabilidades financieras hayan quedado atrás (criar hijos o pagar una hipoteca), la realidad es que este tipo de pólizas pueden garantizar una atención de calidad para su cónyuge a medida que envejece o aumentan sus gastos médicos, así como cubrir las facturas médicas, los gastos funerarios y las deudas pendientes. Además, también puede proporcionar una herencia para sus seres queridos.
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