En el límite
La música no es sólo un puñado de acordes. Cada canción es más que un conjunto de palabras bien enlazadas. Cualquier composición -no todas en realidad- es capaz de levantar emociones. También puede servir para explicar una situación, o bien para describir un momento. La música es probablemente lo mejor de El Arcángel en lo que va de temporada. Y eso es, además de por el notable repertorio seleccionado, porque algo no funciona. Precisamente lo que marcha mal es lo más importante, el equipo. El Córdoba atraviesa esta campaña una de sus peores realidades de los más recientes tiempos. Aunque es de todos sus tiempos. Parece caminar con una extrema sordera que, por el momento, le impide escuchar a quien guía hacia la victoria. Un triunfo que ya no puede esperar más. Ineludible tarea es la que tiene, por tanto, este domingo (18:00), día en el que ha de recuperar el ritmo para no traspasar la delgada línea que separa la luz de la oscuridad. Sobre todo porque visita al que por ahora es su rival más directo, un Sevilla Atlético no menos apurado. Pero el filial hispalense llega tras un buen baile.
“Vivimos siempre esperando una señal”, dice una canción de finales de los ochenta -de 1989 para ser más exactos-. Es lo que aguarda la afición del Córdoba hoy por hoy, a esas alturas del curso en las que resta un mundo por delante y al tiempo las horas son segundos. Una señal por parte de su equipo, el que dirige Juan Merino, para al fin recobrar la esperanza en que, en efecto, aún falta demasiado para darse por vencido. Es el deber del conjunto blanquiverde, que encara esta nueva cita liguera como colista de Segunda A y después de sumar un punto de los últimos 18. La derrota esta vez es mucho más que una derrota, de ahí que ni siquiera aparezca en el mapa de opciones del técnico. El linense también aguarda esa señal que permita pensar en el inicio de una nueva etapa, más fructífera y menos complicada.
Difícil es tanto como dura la situación del Córdoba, que en cierto modo rememora el tema más recordado de La Frontera. “No es difícil encontrar/el paraíso en la oscuridad” es otro extracto de esa canción de un grupo que define a la perfección el lugar en el que se sitúa el cuadro califal. Cierto es, está en última posición. Y sin embargo anda ante la verja que desune el verde campo de la ilusión del baldío terreno de la agonía. Si quiere tomar impulso para saltarla en sentido del primero no puede hacer otra cosa que no sea ganar ante el Sevilla Atlético. En ello piensa Merino y, ése es el deseo de la afición, el propio vestuario.
Para este encuentro, que delimita el pánico creciente de la bocanada de aire fresco, el técnico recupera a Jovanovic. No obstante, el serbio no apunta, al menos a priori, al once inicial. Una alineación de la que se cae por sanción Sergi Guardiola. Es decir, toca recomponer la figura. En este sentido, lo más probable es que Merino mantenga la línea de cinco por delante de una defensa de tres y con un hombre de apoyo para Jona. En principio, Víctor Mena se postula para desempeñar el papel de carrilero izquierdo. Circunstancia ésta que abre la puerta a Javi Galán a ejercer de mediapunta. Aunque hay dudas razonables, puesto que el pacense puede continuar en su puesto y entrar en esa posición Markovic. O Alfaro, quién sabe. Lo importante es que el cuadro califal dé un paso delante de una vez por todas.
“Es duro estar tan abatido/cuando no siente el dolor/es como clavar un cuchillo/en lo más hondo del corazón”, continúa la canción. El Córdoba está abatido y quiere dejar de estarlo. Quiere sentir y arrancarse cuchillo del pecho. Eso sólo es posible si gana. Una tarea complicada incluso ante quien hasta hace una semana pareciera un muerto en vida. Es el Sevilla Atlético, que afronta el duelo tras superar al Granada (1-2) y encadenar cuatro jornadas sin perder. Dicho de otro modo, acude a la cita como el soldado revitalizado, sanado y más fuerte. Más si cabe después de que Luis Tevenet haya recuperado a hasta seis futbolistas que tuviera ausentes. Entre ellos Álex Muñoz o Marc Gual, quienes probablemente entren en el once. El efecto revulsivo es lo que quiere mantener el cuadro del Viejo Nervión, que también está en El límite. Ya lo sabe todo el mundo, ésta es la lucha por escapar de la oscuridad y ver la luz. “En el límite del bien/en el límite del mal”… De lo segundo quiere huir el Córdoba. Y el problema es que su rival también.
ALINEACIONES PROBABLES
SEVILLA ATLÉTICO: Juan Soriano, Matos, Amo, Álex Muñoz, Carmona, Curro, Felipe Carballo, Fede San Emeterio, Olavide, Pozo y Marc Gual.
CÓRDOBA: Kieszek, João Afonso, Vallejo, Josema, Fernández, Edu Ramos, Aguza, Caballero, Mena, Javi Galán y Jona.
ÁRBITRO: Pérez Pallas (Comité Gallego).
CAMPO Y HORA: Viejo Nervión (18:00).
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