“Es una pena tremenda que el flamenco se haya alejado de los Patios de Córdoba”

Las jornadas de Los Patios, esencia de Córdoba llegan a su fin este jueves en la Casa de las Campanas. Una iniciativa organizada por Cordópolis y la Fundación Cajasol, y respaldada por el Ayuntamiento de Córdoba. Aun así, no significa que la última cita sea la que menos importancia requiere. De hecho, es de las más importantes porque se ha celebrado desde un patio cordobés, con dos de las artistas más reconocidas en el flamenco. Por un lado, Rocío Luna, cantaora de la Cañada de Rabadán -pedanía de Fuentes Palmera-, ganadora de la Lámpara Minera 2023, mientras que, por el otro, la guitarrista con más seguidores en redes sociales del mundo, Teresa Jiménez.

Un diálogo que ha sido moderado por Juan Velasco, periodista de Cultura, y Rafael Ávalos, colaborador. Ambos de este mismo periódico que han logrado conectar con ambas invitadas en la Casa de las Campanas. Dichas jornadas se han celebrado este mismo jueves a partir de las 20:00, con un inicio donde Ávalos comenzó con unos versos de José de Miguel, poeta vinculado a Cántico, con motivo del escenario que en ese momento compartía con su compañero. La cita que servía para cerrar este evento organizado por Cordópolis se denominaba Patios evocadores: cultura entre las flores. Y el protagonismo recayó rápidamente para las dos invitadas.

“Tradición, familia, casa y, sobre todo, tranquilidad. Vivimos en una vida de desenfreno y cuando tengo la oportunidad de venir a la Casa de las Campanas o dar un paseo por San Basilio, ahí estás en casa, en Córdoba”, así empezaba Teresa Jiménez su respuesta a la pregunta de qué le recordaba los Patios de Córdoba. Y es que ambas protagonistas, pese a su larga trayectoria, son de una alta juventud, por lo que su recuerdo de esta festividad es muy diferente al de otros. En el caso de Rocío Luna llega de una pedanía de Fuente Palmera y no tuvo tanto contacto con los Patios de Córdoba, pero sí que recuerda su infancia con cariño, sin móviles. “Cada vez que veo un patio, me sale cantar. Es un lugar de inspiración. Cuando veníamos de excursión a la capital, esto era otro nivel a lo que tenía en mi pueblo. Me quedaba super sorprendida”.

Y es que tanto Rocío como Teresa tienen un gran recorrido internacional. Es por ello que son las mejores vendedoras de Córdoba. “Yo hablo mucho de mi tierra. Cuando estoy en el extranjero, me doy cuenta de la suerte que hemos tenido. Yo creo que es mentira cuando dicen que los cordobeses no estamos orgullosos de Córdoba. Hay mucha gente que tiene que aprender de nosotros en ese sentido”, recalca Teresa Jiménez. Por su parte, la cantaora ha explicado que es “una pena” que la fiesta de los Patios de Córdoba haya perdido su esencia. “Hay que recrearse y oler. Es un conjunto de cosas. Aunque eso parece que está pasando en todos lados”. Mientras tanto, Jiménez también ha querido subrayar que hay que disfrutar de Córdoba. “A mí me encanta pasear por Córdoba y oler a azahar. Somos unas personas con mucha sensibilidad y nosotros debemos ponerlo en valor”.

Asimismo, la unión entre el flamenco y los patios debe prevalecer. Todos los palos tienen cabida en estos escenarios. “Córdoba es paz, tranquilidad y para mí se me vienen las soleas, las serranas y las alegrías. Lo siento muchísimo. Soy de aquí, lo he vivido y me acuerdo de los palos de aquí. Además, aquí soy libre y de chica también lo era”, explica Rocío Luna. Entretanto, estos espacios se han apartado del género musical, cosa que entristece a una, aunque otra rezuma positividad. “Es una pena tremenda porque los jóvenes flamencos tenemos las ganas de tener un sitio para reunirnos. El flamenco no es solo estudiar. El flamenco necesita esa libertad”, ha apuntado Rocío Luna. “A mí me gusta ser positiva y todo vuelve. Esas tradiciones volverán. Rocío y yo no nos sale cantar o tocar, pero cuando la esencia queda, eso volverá a resurgir seguro”, ha aseverado Teresa Jiménez. Ambas han pedido al Ayuntamiento de Córdoba que recupere esta tradición para que el flamenco vuelva a ser de la gente.

Tras ello, ambas artistas han seguido respondiendo a las preguntas de Juan Velasco y Rafael Ávalos, entrando en el flamenco genérico, y su posible vinculación con otros géneros, como el reggaetón. Y esto hace que el foco en sus carreras esté puesto en lugares diferentes. “Estoy componiendo mi primer disco y a la par montando mi espectáculo. Además, soy embajadora de JBL y por eso tengo la posibilidad de grabar, por ejemplo, con Martin Garrix. Gracias a la gente como nosotros, vamos a poder llegar a otra gente que no tiene ni idea de flamenco ni de los Patios de Córdoba. Si nos quedamos solo con los puristas, no nos extenderíamos”, explica la guitarrista. Por su parte, Rocío Luna también tiene un camino marcado en su futuro a corto plazo. “Yo estoy yendo a por un flamenco más purista. No descarto hacer otras cosas que también me gustan, pero ahora mismo voy a lo más ortodoxo. Estoy buscando inspiración en el patio de mi abuela”. Además, y volviendo al flamenco más puro, Luna ha apuntado que tiene una disparidad de opinión sobre la poética de este género musical. “Hay ciertas letras que son eminencias, pero después hay otras que son machistas y es mejor guardarlas en un cajón”.

Para terminar y de forma improvisada, Teresa Jiménez cogió su guitarra y comenzó a tocar, con motivo de sus últimas obras sacadas a la luz. Por su parte, Rocío Luna también tuvo su momento, donde tomó el testigo de su compañera para acompañarla con una alegría que emocionó a todos los asistentes en la Casa de las Campanas. Un cierre de jornadas en el que Rafael Ávalos di las gracias tanto al periódico como a la Fundación Cajasol por hacer posible este ciclo, así como al Ayuntamiento de Córdoba por respaldar la iniciativa y a la Asociación Amigos de los Patios por ceder la Casa de las Campanas.