Un clásico andaluz de alto voltaje
Las estadísticas están para romperlas. Es una de las expresiones con más uso en el mundo del fútbol y que no pocas veces queda en un tópico. Sin embargo el Córdoba se aferra en esta ocasión más que nunca a ese dicho, toda vez que el triunfo puede suponer un espaldarazo en su complicado camino hacia la permanencia. Tras superar al Reus, el conjunto blanquiverde acude a un campo de solera y que conoce muy bien. Se trata del Ramón de Carranza, que el próximo sábado (21:00) acogerá una nueva edición de lo que es uno de los grandes clásicos andaluces. El equipo de Carrión visita al Cádiz para la disputa de un duelo de alto voltaje. No por la tensión entre clubes o entre aficiones sino por lo que los dos conjuntos se juegan en dicha contienda. Uno busca un paso al frente en su lucha por la salvación y el otro, idéntica meta pero para lograr un puesto en el play off de ascenso. Los precedentes desequilibran la balanza del lado amarillo, pero el cuadro califal está dispuesto a tirarla en unos días.
El choque del próximo sábado siempre aparece en el calendario con gran atractivo. No en vano, los dos equipos comparten un largo historial de enfrentamientos que sólo dejó de darse en Primera. Tanto el Córdoba como el Cádiz se enfrentaron en las otras tres categorías que actualmente siguen a la máxima. Fue en Segunda A donde más veces se vieron las caras los dos conjuntos, que también midieron fuerzas en Copa del Rey. Precisamente en ese torneo se dio el último precedente del partido en el Ramón de Carranza. Fue sólo hace unos meses, el pasado año, cuando los blanquiverdes se impusieron por 1-2 para conseguir su pase de ronda. Si bien el más reciente recuerdo es positivo no lo es tanto el balance del cuadro califal en la Tacita de plata. En ese sentido, de sus 26 visitas a tierras gaditanas -tres de ellas en Copa- sólo sumó cuatro victorias -dos de ellas en el torneo del KO-. Por el contrario, salió derrotado hasta en 14 de sus comparecencias en casa de la escuadra amarilla.
Otro dato ciertamente desalentador es el que refleja el número de goles a favor y en contra del Córdoba en este tipo de encuentros. Porque los blanquiverdes apenas lograron marcar 23 y recibieron nada más y nada menos que 44 en esos 26 choques que disputó en el Ramón de Carranza. Pero los guarismos del pasado son sólo eso, cifras que ya no tienen peso en el presente, en el que los dos equipos afrontan el clásico andaluz en situaciones diferentes pero con idéntica necesidad del triunfo. Para el cuadro califal lograrlo supondría dejar a falta de otros tres puntos su garantía de continuidad en la categoría de plata. Para los amarillos, sería un paso adelante hacia el play off. En esa batalla de intereses cruzados habla en beneficio del equipo de Luis Miguel Carrión que los de Álvaro Cervera mantienen una trayectoria discreta desde hace ya varias jornadas: en las últimas ocho sólo logró una victoria y acumuló hasta seis empates -sólo perdió una vez-. Quizá la presión pueda pasarles factura a los gaditanos o quizá sea aprovechada sin más por los cordobesistas.
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