Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Córdoba CF - FC Barcelona B
Contracrónica
Volvimos

Córdoba CF - FC Barcelona B

Cristian López

23 de junio de 2024 23:55 h

0

Así es. Se ha hecho. Ya está. Ya se puede respirar tranquilo. Después de los nervios. Del insomnio. De todas las vueltas en la cama sin saber qué hacer. Después de todo, el objetivo se ha cumplido. El Córdoba CF ha vuelto. Ya no está herido. Ya no sangra. Ahora ha levantado la rodilla y ha golpeado con todas sus fuerzas. No hay nadie en la otra esquina que haya podido con la furia de un equipo armado de orgullo, de ganas, de coraje. De fútbol. Nada de triquiñuelas. 

San Rafael se abrazó con San Juan. Juntos y unidos para tocar el cielo de nuevo. En El Arcángel. O en Las Tendillas. El primer gol de Toril hizo tambalear todo el Campo de la Verdad. Con el segundo ya no hubo loco que se aguantara quieto. El Reino cordobesista vibró como nunca más lo hizo en los últimos cinco años. El Córdoba CF ha vuelto. Hemos vuelto a donde nunca se debió caer. Tanto tiempo de vacío que se llena en un instante. En un abrazo. En un beso. En un suspiro. Un gol. Un balón despejado. Una parada salvadora. Un pitido. Una milésima de segundo de silencio. Y desde ahí, la euforia máxima. 

Como cuando ves a tu colega de siempre después de mucho tiempo. Y de repente se para el reloj. Y de repente volvimos a abrazarnos. Cuántas guerras a la espalda. Hoy se le ha guiñado un ojo a la suerte. Hoy se ha vuelto a sonreír. Pero de alivio. Despejado el sufrimiento. Por esos abuelos que aún recuerdan los ascensos de antaño, y esos nietos que lo han vivido por primera vez. Cartagena. Huesca. Las Palmas. Mérida. Córdoba. Ahora sí, en casa.

El Córdoba CF ya no sangra. Ahora golpea más fuerte. Se muerde el labio y respira. Golpea otra vez. Nadie sueña más fuerte que él. Del pie salvador de Marín, al balón picado de Toril. Los cortes de balón de Isma Ruiz. Los centros de Calderón. Las arrancadas de Albarrán. La solidez de Lapeña. Los brazos en alto de Iván Ania. Dijo que se iba a conseguir. Y lo hizo.

Esto va por los 21.485 espectadores que han estado este domingo en El Arcángel. Los cientos que lo han visto en El Arenal. Y los miles que lo han hecho desde sus casas. En Córdoba o en cualquier otro punto de España. O en el extranjero. El Córdoba CF no tiene fronteras. La ilusión no tiene precio. Va por todos ellos. Por los abuelos y abuelas. Por los padres y madres. Hermanos. Hijas. Nietos. “Va por ti, mamá”, como quedó reflejado en la camiseta del héroe de la noche. Volvemos. Por ti. Por todos. 

Etiquetas
stats