El Córdoba CF encuentra la estabilidad defensiva

Se ha hablado a lo largo de estas líneas en los últimos días del equilibrio máximo que ha marcado el devenir del Córdoba Club de Fútbol a lo largo del presente año. Se acaba el 2025 y es momento de analizar y vislumbrar cómo ha sido la andadura de los blanquiverdes a lo largo de los últimos doce meses, un periodo que ha sido fundamental para volver a consolidar al club en LaLiga Hypermotion. Y en eso seguirán los de Iván Ania de cara al segundo tramo de la campaña 2025-26, con sus luces y sus sombras, pero tratando de edificar un proyecto sólido y que mire hacia arriba. Son muchos los datos significativos en torno a la entidad cordobesista, tales como el hecho de haber sido más sólido como visitante que como local, además de haberse evidenciado una irregularidad considerable en cuanto a la pólvora ofensiva, donde el equipo aún no ha encontrado un goleador de primer nivel para la categoría de plata, siendo muchos los nombres que han tenido que aportar ofensivamente para los califas.

De hecho, la dirección deportiva trabaja de cara al mercado de invierno, donde la delantera será una de las demarcaciones más relevantes a la hora de realizar refuerzos. Eso sí, en el terreno contrario, la defensa sí que se ha asentado a un nivel considerable. Es más, siguiendo la estela de estadísticas que abrazan la estabilidad del Córdoba CF, hay otra que viene a subrayar el peso defensivo del plantel de Iván Ania como uno de los más fiables de toda la división.

Y es que, en esas labores, el club cuenta con dos de los mejores arqueros de toda la categoría. Una dupla integrada por Carlos Marín, capitán y asentado como pieza clave del crecimiento de los últimos años, teniendo récords en su haber como de más penaltis atajados en una sola temporada, así como Iker Álvarez, un fichaje en la sombra que ha acabado quedándose con el puesto de titular indiscutible y salvador del plantel en no pocas ocasiones. Igualmente, pese a que las lesiones han lastrado al equipo en este primer tramo del curso, no hay duda que Rubén Alves y Fomeyem forman una de las parejas de centrales más potentes de la Segunda División, aunque Álex Martín y Xavi Sintes han evidenciado igualmente un gran nivel cuando han jugado. En la derecha, Carlos Isaac es indiscutible, mientras que el lateral izquierdo ha sido más irregularidad, por las lesiones de Vilarrasa y Alcedo, al tiempo que Albarrán ha tenido que sumar muchos minutos a banda cambiada.

Pese a todo, el Córdoba CF no ha sufrido en demasía, manteniéndose en un punto de equilibrio, sin excesivos errores, pero tampoco sin grandes sorpresas defensivas. Los datos reflejan que el conjunto califa ha encajado tantos goles como se podía esperar en cuanto a ocasiones generadas en su contra. Y es que la estadística es muy clara. En las 19 jornadas disputadas hasta el momento, los goles esperados a encajar por parte del equipo de Ania son 23, exactamente la misma cifra de tantos recibidos por el equipo. Un valor exacto que remarca aún más ese contrapeso continuado y que solo iguala en toda LaLiga Hypermotion el Granada CF, con los mismos goles esperados y recibidos (24), según los datos del perfil especializado @StatsSegunda.

Así las cosas, en los extremos de esa clasificación se encuentran equipos como el Cádiz CF, con la diferencia más positiva para su registro, puesto que la estadística de goles esperados indica que debería de haber encajado 25,4, mientras que tan solo ha recibido 19; al tiempo que en el polo opuesto figura la Real Sociedad B, con 29 en su contra, cuando se esperaban tan solo 25,7. Una vez más, el Córdoba CF se mantiene en una tierra de nadie. En una zona media estable y cómoda, pero con el reto de asaltar objetivos mayores.