Carlos García, del Córdoba CF a Unionistas

Poco a poco, los futbolistas que pertenecieron a la histórica plantilla del Córdoba CF que logró el ascenso a Segunda División, y que no contaban para Iván Ania en la categoría de plata, van encontrando acomodo en diferentes clubes. La mayoría de los futbolistas que acabaron contrato ya están bajo las órdenes de un nuevo equipo, como son los casos de Alberto Toril (Alajuelense), Simo (Eldense), Yussi Diarra (Numancia) o Iván Rodríguez (Antequera). Sin embargo, ahora le ha llegado el turno de cambiar de colores a un jugador que estuvo la pasada temporada en calidad de cedido en el Córdoba CF: Carlos García.

El central barcelonés, de apenas 24 años, llegó al Córdoba CF desde el Cádiz CF, como un préstamo en que los gaditanos buscaban foguear más a un defensor en el que tenían depositadas muchas esperanzas pero que ya había perdido su condición de sub 23, mientras que los blanquiverdes reforzaban su defensa con un central de futuro que hiciese competencia a los Gudelj, Lapeña y compañía. El bagaje previo era esperanzador, con cierta experiencia en la categoría a pesar de su edad, un debut en Primera División con el Cádiz CF, y una última temporada en su filial, en Segunda RFEF, donde había sido indiscutible.

Lo cierto es que el central catalán no tuvo la confianza de Iván Ania desde el inicio, puesto que la apuesta del entrenador ovetense parecía ser claramente la pareja formada por Gudelj y Lapeña. Carlos García acabaría debutando el 16 de septiembre en la derrota blanquiverde ante el Linares Deportivo (0-1), completando los 90 minutos pero dejando algunas dudas en cuanto su contundencia. Todas logró disiparlas tan solo una semana después, con un gran duelo defensivo ante el Alcoyano que cortó la mala dinámica. Siguió siendo titular ante el Recreativo Granada, pero la derrota ante el Algeciras (0-1) acabó por costarle el puesto.

Así, poco a poco fue ganándose la confianza de Iván Ania, estableciéndose como tercer central. Los acontecimientos ocurridos en torno a Dragisa Gudelj hicieron que Iván Ania volviese a contar con Carlos García para el centro de su zaga, y respondió con un grandísimo encuentro en El Arcángel, ante el Castellón, donde logró 'secar' a uno de los equipos más potentes ofensivamente de la categoría. A partir de ese momento, iría alternando titularidades con suplencias, toda vez que el ascenso de Mati Barboza desde el filial fue meteórico. Así, Carlos García cerró su estancia en Córdoba con un total de 18 partidos jugados, 1 gol y más de 1200 minutos como blanquiverde.

Ahora, Unionistas de Salamanca ha fijado sus ojos en él, y ha logrado hacerse con los servicios del central en propiedad. Así, con 24 años, Carlos García sale de la dinámica del Cádiz CF y se enrola con los salmantinos, firmando por una temporada con ellos.