El Bujalance, preparado para arrancar y con sus teóricos rivales de bronce

Con la plantilla prácticamente cerrada, llega la hora de retomar el pulso a la actividad. Es lo que va a hacer precisamente en una semana. Porque el Bujalance lo tiene todo preparado para iniciar su pretemporada, que en esta ocasión es la del soñado retorno a Segunda B. Así, el conjunto rojillo va a arrancar con su puesta a punto para un reto difícil pero marcado por la ilusión, lo que va a suceder el próximo martes -o lo que es lo mismo, el 8 de septiembre-. La rutina la recupera, además, el equipo de Fermín Hidalgo con un esbozo de la que va a ser su hoja de ruta la campaña 2020-21. Si bien todavía no es oficial, el club del José Pérez Pozuelo Pepe Montalbán ya conoce a sus teóricos rivales y el sistema de competición.

La espera en su caso es menor que en otros, toda vez que a mediados de julio disputó el play off exprés a Segunda B -que esta vez fue a sólo un partido-. Entonces alcanzó el cuadro cordobés su ansiado regreso a una categoría que merece como mínimo. Sin embargo, ahora todo cambia: es el momento de pensar ya, únicamente, en el desafío de la permanencia -al menos- en la división de bronce. Éste es el principal objetivo que persigue un Bujalance que afronta el nuevo curso, aún lleno de incertidumbre, con la mayor parte de su bloque de la pasada campaña en la plantilla y apenas tres refuerzos aunque de calidad. El técnico, Fermín Hidalgo, cuenta con 14 jugadores, por lo que se prevé el vestuario no va a recibir más inquilinos.

El regreso al trabajo del conjunto rojillo está previsto, en efecto, para dentro de una semana exacta. La actividad la recobra entre las necesarias medidas higiénicas y sanitarias con motivo de la pandemia de Covid-19. Por este hecho, y falta todavía del protocolo para el deporte no profesional, aún no tiene dispuestos duelos amistosos. Es posible, de hecho y debido a las fechas, que no tenga opción de jugarlos. En cuanto a los jugadores que conforman el plantel, Juan Carlos, Jesús Medina, Zafra, Isaac, los hermanos Antonio y Pedro Catiti, Jesús Flores, Julio, Álvaro, Pingu y Antoñito siguen respecto de la anterior temporada. A ellos se suman Tete, Jesús y Cristóbal, éste en forma de fichaje estelar.

Todos estos futbolistas, a las órdenes de Fermín Hidalgo, van a arrancar su período de preparación más tarde de lo que suele ser habitual. Las circunstancias mandan, y además la temporada va a comenzar también con atraso en el calendario. Aunque no existe nada oficial a nivel federativo, se espera que la Segunda B pueda ponerse en marcha el 26 de septiembre, o quizá el fin de semana posterior -primero de octubre-. El sistema de competición va a ser similar al de otras como las categorías amateur de fútbol. Así, el Grupo V en que está encuadrado el Bujalance, se va a dividir en otros dos para después disputar otra fase con un grupo en lucha por el play off y otro por la permanencia en la división de bronce.

Así, en principio el conjunto rojillo va a formar parte del subgrupo B junto con otros ocho equipos. Todos sus rivales van a ser andaluces, a excepción del Ceutí y el Jerez Futsal de Extremadura. Al club de la Ciudad Autónoma y al pacense hay que añadir el Real Betis B, Nazareno y Brand Carmonense por la provincia de Sevilla. También a los gaditanos Xerez Toyota Nimauto y Cádiz CFV, así como al Jaén Paraíso Interior B de la capital del Santo Reino. Mientras, el subgrupo A lo van a componer, en principio, la Coineña, el Victoria Kent, el Carranque y el Suspire Café TFS de Málaga; el Sima Granada; el Zambú Pinatar, Adimul Puntarrón e Imperial Deportivo de Murcia, y los melillenses Melistar y Sporting.