El juzgado archiva la investigación sobre el incendio de la Mezquita Catedral
El Juzgado de Instrucción número 2 de Córdoba ha dictado un auto en el que acuerda el sobreseimiento provisional de las diligencias previas incoadas tras el incendio ocurrido el pasado mes de agosto en la Mezquita Catedral de Córdoba, según han confirmado a este periódico fuentes judiciales.
El titular del juzgado, Arturo Vicente Rueda, ha tomado la decisión después de analizar el informe pericial remitido por la Policía Nacional, que concluyó que el origen del fuego fue fortuito. Los agentes de la Policía concluyeron que el inicio del incendio estuvo en las baterías de unas barredoras eléctricas que en ese momento no estaban puestas en carga. Un fallo en las baterías provocó una especie de “arco” de fuego, según el informe.
Las barredoras se localizaban en el interior de una capilla que se usaba como cuarto de limpieza. En esa capilla había material para la limpieza, además de sillas de madera apiladas para su uso en el templo. Todo estaba tapado por una gran cortina que se elevaba hasta las cubiertas. El “arco” de fuego alcanzó las cortinas, lo que hizo que las llamas se propagasen hasta la techumbre.
El informe policial no consideraba doloso el inicio del fuego. Ahora, el magistrado ha entendido que se trata de un fuego fortuito y por tanto no ve responsabilidad penal en su inicio. El incendio acabó saliendo por encima de las cubiertas. La rápida intervención de los bomberos evitó que se propagase por la techumbre al resto del monumento y quedó actoado a una zona lineal de unos 25 metros.
El fuego se produjo a las 21:25 del pasado 8 de agosto, cuando el monumento estaba cerrado al público. Las imágenes de las llamas saliendo por encima de la cubierta dieron la vuelta al mundo.
Las autoridades de la Junta de Andalucía y el Cabildo ya han iniciado trabajos urgentes de limpieza, apuntalamiento y protección contra la lluvia. La consejera de Cultura, Patricia del Pozo, ha estimado que la rehabilitación completa podría culminarse a mediados de 2026, tras presentar el proyecto definitivo en otoño.
Además, se han activado protocolos de mejora en el Plan de Autoprotección del monumento, como la instalación prevista de un sistema de nebulización (tipo Notre-Dame) para reforzar la seguridad en zonas de difícil acceso.
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