La Asociación de Funcionarios de Prisiones pide el traslado de Córdoba de David Charlín antes de que ocurra “una desgracia”

La Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP) ha pedido a la directora del Centro Penitenciario de Córdoba el traslado de David Charlín a otra cárcel “antes de que se produzca una desgracia”.

La sección sindical en Córdoba de la APFP ha reaccionado así a los altercados protagonizados en los últimos días por este interno, condenado por matar a otro recluso con una raqueta de ping pong y un arma blanca de fabricación casera y que está clasificado en primer grado, incluido en los Ficheros de Especial Seguimiento (FIES), un estatus que en España solo tienen 25 presos.

Esta asociación ha lamentado la llegada a la cárcel de Córdoba “del interno de extrema peligrosidad” y ha denunciado su falta de adaptación al régimen de vida ordinario. Según alertan, desde su última entrada en el centro, el pasado 7 de abril, “ha insultado y amenazado a los compañeros que trabajan habitualmente en el módulo de aislamiento, incluso a sus familias y se ha abalanzado sobre ellos con intención de provocarles daños o lesiones graves, incluso con un objeto punzante”.

En este ámbito, APFP ha recordado que lleva años solicitando que los funcionarios de Instituciones Penitenciarias tengan la consideración de agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones. De lograr esta distinción, este tipo de agresiones se calificarían como algo más que “sanciones regimentales”. Y es que, en estos momentos, insultar y amenazar a un funcionario de prisiones solo conlleva sanción penal se se ocasiona a los trabajadores lesiones graves.

“A los internos les sale gratis. No es agradable escuchar día tras día 'te tengo que matar' o 'te mando sicarios', u 'os meto una hostia a cada uno y como mucho me quedaré por las tardes viendo la televisión'”, lamenta la asociación profesional, que ha solicitado en escrito registrado a la dirección del centro el traslado de forma inminente de este interno “para evitar actos de la misma índole hacia los funcionarios afectados del departamento y evitar agresiones del citado interno hacia los mismos u otros trabajadores del centro”.