25N

“Hoy estoy aquí como superviviente de violencia machista”: Córdoba escucha la voz de las víctimas

“Hoy estoy aquí como superviviente de violencia machista”. Ella es Mari Paz, cordobesa de 38 años. Lleva grabada a fuego la fecha del 17 de octubre de este mismo año, hace poco más de un mes, el día en que tomó la decisión de cortar la relación con su pareja y poner, poco después, una denuncia contra él por violencia de género. Como dice, es superviviente después de dos años de agresiones físicas y psicológicas. También de violencia económica, porque trabajaba en la empresa de su expareja y, al terminar la relación personal, se quedó sin empleo.

Este martes, su testimonio ha sido la voz que las víctimas de violencia de género han llevado a las instituciones de Córdoba, al Pleno extraordinario que han celebrado tanto el Ayuntamiento de la capital como la Diputación Provincial con motivo del 25N, Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Y allí, la crudeza del relato de su experiencia ha querido servir para que la concienciación sobre la violencia de género tome un nuevo impulso y tenga eco en las instituciones y en el conjunto de la sociedad.

Tras las agresiones, Mari Paz pidió ayuda al sistema sanitario y un Equipo de Atención a la Mujer del distrito Córdoba-Guadalquivir la atendió. Una enfermera y un psicólogo fuero quienes dieron la voz de alerta ante su caso de maltrato, cuenta esta mujer a Cordópolis en esta jornada previa al 25N en la que ha tomado la voz. Luego, le siguieron entrevistas con asistentes sociales, también a sus dos hijos menores que convivieron con su expareja. Y emprendió el camino de dejar atrás la vida de violencia y control que él le había dado.

Testimonio para concienciar también en centros escolares

A través de la Plataforma Cordobesa contra la Violencia a las Mujeres -colectivo pionero en España en este ámbito-, Mari Paz ha canalizado también su situación, prestándose a que su voz sirva para formar y concienciar en centros educativos, participando en talleres donde los escolares conocen -adaptada a sus edades- la realidad de la punta del iceberg de la desigualdad que es la violencia contra las mujeres por el mero hecho de serlo. “Una experiencia maravillosa”, dice, sobre cómo su voz puede servir de ejemplo en las aulas para desentrañar comportamientos no igualitarios.

Porque esos comportamientos no igualitarios ya los vivió ella. “Aprendí, sin saberlo, a normalizar cosas que jamás deberían ser normales. Con los años, en mis relaciones de pareja, confundí el control con amor. Acepté que me dejaran a un lado. Acepté que no contaran conmigo. Acepté cosas que hoy sé que eran violencia”, ha expuesto ante concejales y diputados de Córdoba, en una jornada para la reflexión ante la violencia de género.

“Yo siempre lo disculpaba. Pensaba que él llevaba razón. Me culpaba de todo. Y justo ahí empezó el verdadero maltrato: el psicológico y, más tarde, los empujones (...) Yo no tenía lugar en su vida. Me hacía sentir inferior. Me cambió la forma de vestir. Me aisló de mis amistades”, relata esta mujer con la perspectiva de saber identificar ahora como violencia de género.

“Lo que duele no es hablar… Lo que duele es callar”

“Los dos últimos años han sido un verdadero calvario. Aún estoy cicatrizando heridas que no se ven, pero duelen (...) Sus comportamientos me fueron apagando. Y mi cuerpo empezó a hablar por mí: ansiedad, depresión, jaquecas constantes, diarreas, agotamiento emocional… Mi cuerpo colapsó, por todo el abuso físico y mental al que estaba sometida”, ha relatado.

Su testimonio ha centrado el espacio que este martes las instituciones han dedicado a la lucha contra la violencia de género en Córdoba. Un testimonio y una experiencia que ha ido acompañada por la lectura del manifiesto que los grupos políticos de PP, PSOE y Hacemos Córdoba han suscrito -sin el apoyo de Vox-, recordando a las víctimas, citando las leyes y el Pacto de Estado contra la violencia de género y mostrando su compromiso por continuar la acción contra las violencias machistas.

También se han escuchado las reclamaciones que la Plataforma Cordobesa contra la Violencia a las Mujeres ha hecho ante las instituciones, para que se impulsen verdaderamente y con dotación económica las medidas que deben acabar con las violencias machistas, desde la educación y la formación al ámbito social, policial, legal y jurídico, entre otros. Los escolares han tenido también su espacio con la entrega de los premios del Concurso de Literatura Hiperbreve sobre Violencia de Género. Y ha habido lugar, igualmente, para que se hable del papel de los medios de comunicación respecto a la violencia machista, de la mano de la directora de Radio Córdoba, Isabel Sánchez.

Pero, sobre todo, ha sido un día para escuchar a víctimas de violencia como Mari Paz, por ella y por las que ya no pueden o no se atreven aún a hablar. Para ellas ha tenido un mensaje final también: “Para todas las mujeres que puedan estar escuchándome: no estáis solas. Hay salida. Y al final, lo que duele no es hablar… Lo que duele es callar”.

Teléfono 016

El 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 52 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es; también se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600 000 016.