Rifirrafe entre Gómez y Baquerín por su consulta a la Junta Electoral

El líder de Unión Cordobesa reprochó al concejal que “este señor ni es de Córdoba ni lo queremos” cuando preguntaba a Bellido por qué no reclamaba el concurso de acreedores de Arenal 2000

Mientras Carlos Baquerín hablaba, Rafael Gómez le miraba fijamente. En voz baja, le interpelaba. Alguna vez se le llegó a escuchar “no vales un duro”. De esta manera se desarrolló la intervención de Baquerín, que presentó por escrito ocho preguntas después de su consulta a la Junta Electoral Central sobre si Gómez puede seguir siendo concejal al ser un importante deudor municipal.

Finalmente, Baquerín tuvo que realizar las preguntas de forma oral, aunque registró las ocho cuestiones, ya que el presidente del Pleno, Luis Martín, le advirtió que las había presentado fuera de plazo.

El edil de Unión Cordobesa inquirió al teniente de alcalde, José María Bellido, tres cuestiones. En la primera cuestionó “por qué el Pleno, siendo públicas y notorias las circunstancias que lo justificarían, no ha debatido hasta el momento si el señor Gómez incurre en causa de incompatibilidad legal para poder mantener su acta de concejal, adoptando la decisión que en derecho corresponda?”. También solicitó respuesta para saber “por qué el equipo de gobierno no ha instado judicialmente concurso de acreedores de las compañías mercantiles deudoras pertenecientes al Grupo consolidado de Empresas Rafael Gómez Sánchez pese a conocer que ello permitiría al Ayuntamiento recuperar una posición de cobro privilegiada e incluso derivar de forma subsidiaria responsabilidades patrimoniales hacia todos los administradores?”. Bellido le contestó que le responderá por escrito en un plazo de diez días, que es lo que estipula el reglamento del Pleno, a estas cuestiones.

Posteriormente, Rafael Gómez hizo uso de la palabra con la intención de contestarle a Baquerín. En el turno de preguntas, llegó a decir “este señor ni es de Córdoba ni lo queremos en Córdoba”. En ese momento, el presidente del Pleno, Luis Martín, le retiró la palabra.