La secretaria del alcalde de Pozoblanco acusó de acoso al edil tras investigar el contrato de su hijo
La secretaria del alcalde de Pozoblanco, Santiago Cabello, y madre del joven investigado por la concejalía de Personal por su contrato irregular presentó un escrito en el Ayuntamiento denunciando un “acoso laboral” del concejal Gerardo Arévalo después de que esta trabajadora accediera a una nota interna que el edil mandó al regidor alusiva al caso. Según ha podido saber este periódico, esa denuncia de acoso no se ha materializado en ninguna medida contra el edil.
En la nota interna remitida por este, le trasladaba al alcalde el punto de vista de su concejalía en relación al caso que había detectado y que afectaba de lleno al hijo de su secretaria. Desvelada por este medio, Arévalo le pedía que investigara e, incluso, recurriera a la justicia, ayudándose de los servicios jurídicos de la Diputación de Córdoba si así fuera necesario.
Si esto no ocurriera, el edil ya le adelantó que actuaría motu proprio. Y así ha acabado ocurriendo, tal y como confesaba el edil en otro escrito. Cuatro días después de que Arévalo enviara este documento a Cabello, su secretaria denunciaba que en ese escrito se realizaban “graves acusaciones” hacia su persona y su familia, suponiendo un “acoso laboral”. Por ello, solicitaba “protección de sus derechos recurriendo a la vía judicial oportuna”.
Conocedor de la existencia de este documento, el concejal remitió otro escrito al alcalde en el que, en primer lugar, consideraba que la secretaria -al ser la madre del joven- “debe abstenerse de todo escrito o procedimiento que tenga que ver” con su descendiente “atendiendo a los artículos 23 y 24 del Régimen Jurídico del Sector Público”.
En segundo lugar, Arévalo defendía que la acusación de acoso laboral “es falsa” y que esta trabajadora dejó de hablar con él cuando empezó a iniciar la investigación sobre el contrato de su hijo. “Así que, llevo varios meses sin intercambiar palabra con ella, ni de forma directa ni indirecta”.
En tercer lugar, el edil manifestaba que el escrito de acoso podría tratarse “de una medida de presión para que se retire o quede sin efecto” la primera nota interna en el que pedía al alcalde que investigara el caso. Además, las afirmaciones de la secretaria suponían “un ataque falso e infundado” hacia su persona “que podría provocar” que el regidor le cesara de sus funciones. No obstante, señalaba que entendía que “no adoptaría una medida tan grave sin abrir un procedimiento de investigación oficial e imparcial” que aclarara los hechos.
Por último, advertía a Cabello de que los hechos vertidos por esta trabajadora “podrían ser constitutivos de un delito de calumnias y otro de obstrucción a la justicia, ya que, con un falso pretexto, se pretende neutralizar a la única persona que está activamente intentando esclarecer los hechos e iniciando un procedimiento que perjudica” al joven “en aras de la legalidad y el interés del Ayuntamiento”. Este escrito no ha tenido respuesta por parte del alcalde.
Comisión de Personal
Según ha podido conocer este medio, este lunes, el Consistorio acogió una comisión de Personal en la que el alcalde -la presidió en presencia de Arévalo- habló del reintegro de la subvención de la Junta dedicada a promover el empleo juvenil, aunque la oposición buscaba conocer todos los pormenores del contrato irregular. Sin embargo, Cabello se acogió a la investigación interna que afirma haber abierto.
Asimismo, el edil fue preguntado sobre si tenía conocimiento de un escrito de acoso laboral, pero Cabello declinó hacer aclaraciones al respecto dado que “no era el lugar pertinente”. Otras fuentes señalan a este periódico que es en este tipo de comisiones donde se abordan problemas que hayan surgido entre trabajadores municipales con el fin de solucionarlos o poner medidas, pero en esta ocasión no ha sido el caso. El concejal de Personal quiso tomar la palabra, aunque sin éxito.
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