El precio del aceite se hunde, pero ¿por qué no baja el de los supermercados?

El precio que pagan los comercializadores a los productores por el aceite de oliva se ha vuelto a hundir esta semana. Según el sistema Poolred, la media de estos últimos días oscila ya en los 2,5 euros por kilo, una cifra desconocida en los últimos años. Desde que alcanzara su máximo en la pasada campaña, el precio no ha dejado de bajar, pero ¿por qué se mantiene más o menos estable en los supermercados?

Hay varias razones. El precio no deja de bajar por una cuestión especulativa. Los comercializadores compraron mucho aceite caro que ahora tienen que vender. No pueden hacerlo con los precios actuales, lo que le provocaría una venta a pérdidas. Por eso están jugando con la gran demanda existente en los almacenes. El precio no deja de bajar y a pesar de ello apenas si se registran salidas en las envasadoras de aceite de oliva. Ahí está el otro motivo.

Los productores también se niegan a vender a estos precios. Los que lo hacen es movido por la necesidad de colocar ya su producto, pero la mayoría prefiere esperar. Y corren un riesgo: que los precios no solo no se recuperen sino que encima una oferta desmesurada de producto provoque un desplome aún mayor de los precios. Tarde o temprano habrá que vender, piensan muchos comercializadores.

Según el sistema Poolred, el kilo de virgen extra se ha llegado a vender en la última semana a 2,45 euros. También ha alcanzado máximos de 2,99 euros. Pero la media de los últimos días se hunde hasta los 2,50 euros. En el caso del virgen y el lampante la media se hunde hasta los 2,30 euros de media.

En Córdoba y  en abril, las salidas al mercado se calcula una cifra aproximada a las 112.000 toneladas, estimándose 73.000 toneladas de exportaciones y 39.000 toneladas para mercado interior. La cifra de salidas en la provincia de Córdoba es hasta ahora de 164.870.156 toneladas.

En referencia a las existencias totales de aceite a final del mes de abril ascienden a 912.000 toneladas, lo que supone una disminución de 82.000 toneladas respecto al mes anterior. En este aspecto, la cifra para la provincia de Córdoba supone 125.804 toneladas, registrándose también un descenso frente a las 143.144 toneladas de existencias finales en el mes anterior.

Resumen: hay aceite de oliva de sobre en las almazaras. El juego de los precios parece que no ha hecho nada más que comenzar.