Loyola pone en marcha aulas de mediación en colegios
La Universidad Loyola Andalucía, a través del proyecto Druida, está poniendo en marcha aulas de mediación en los centros educativos para difundir la cultura del acuerdo entre los escolares como parte de su proceso educativo y su formación personal y profesional, según ha informado la institución educativa a través de una nota de prensa.
En un acto celebrado en el campus con directores y orientadores de colegios cordobeses, Javier Ales, director del proyecto y del Foro Internacional de Mediadores Profesionales, al que pertenece la Universidad, explicó que “este proyecto, que sigue las directrices de la Unesco a través de su plan Cultura para la Paz es acogido por la Universidad Loyola Andalucía para hacerla extensiva al resto de la comunidad educativa de cualquier ciclo o nivel”.
Ales explica que “es muy importante tomar conciencia de la relevancia que posee esta etapa en la vida de cada persona, pues es cuando se adquieren los valores y principios que determinan su carácter y personalidad futura. Las vivencias de estos años son vitales en el aprendizaje del ser humano en su camino hasta convertirse en un adulto. Durante este periodo, familia y escuela juegan un papel fundamental”.
Ciudadanía resoluta
Asimismo, el responsable del proyecto señala que “resulta importante formar en Mediación desde edades tempranas pues, de este modo, conseguiremos que la sociedad futura, a la hora de afrontar un conflicto, se plantee como primera opción el diálogo y la comunicación, en contraposición a la cultura de la confrontación a la que estamos habituados. En definitiva, lograremos una ciudadanía caracterizada por su capacidad resolutiva”.
La mediación, como método de gestión de adversidades, no pretende eliminar el conflicto, sino que parte de la premisa de que el conflicto es necesario y positivo, puesto que es el primer paso en el reconocimiento de la existencia de un problema y refleja un deseo por resolver dicha situación. Pero el conflicto debe ser guiado, en su resolución, por un método que potencie su acción sanadora sobre el problema y no convertir las relaciones humanas en espirales autodestructivas de las que no se sabe salir.
0