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Las 17 tabernas de Córdoba que optan al sello de 'históricas'

Las 17 tabernas de Córdoba que optan al sello de 'históricas'

Jesús Ventura

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Un título que recalca la importancia de estos establecimientos en una ciudad como Córdoba. Es por ello que el Ayuntamiento de la capital califal ha puesto en marcha que varias tabernas puedan solicitar el sello de históricas, tal y como informó el alcalde José María Bellido desde la Taberna Salinas. Aun así, los requisitos no son pocos, ya que desde el Consistorio han dictado que dichos emplazamientos tengan que llevar abiertos más de 75 años de manera interrumpida, salvo causa de fuerza mayor, que apuesten por la gastronomía típica cordobesa en su carta y que, además, sea relevante en la cultura e historia tradicional cordobesa, que contenga elementos de valor patrimonial e histórico, que puedan estar protegidos, como el mobiliario, la ornamentación de las fachadas y su imagen sea seña de identidad de las tabernas. Por tanto, más de diez establecimientos cumplen con estas características y CORDÓPOLIS ha tenido acceso a la lista que posee el Consistorio de Córdoba para desgranártelas una a una.

Taberna Sociedad de Plateros

En el corazón de Córdoba, entre los barrios típicos de San Lorenzo y la Plaza de Cristo de Gracia, se creó la Sociedad de Plateros en 1868, a raíz de la crisis política y económica que atravesaba el país, con el fin de socorrer a los plateros más desfavorecidos, tal y como reza la web de turismo gastronómico tanto de la Junta de Andalucía como de la Diputación de Córdoba. Esta taberna-restaurante dispone de bodega propia con despacho de vinos y está especializada en la elaboración de bacalao, con más de treinta platos diferentes, por lo que también se le conoce como la Posada del Bacalao. Todos los interesados en acudir a este establecimiento, se encuentra en la calle María Auxiliadora, 25.

Taberna San Francisco

Creada en 1872 y ubicada en la calle San Francisco, número seis. Este establecimiento ha permanecido abierto desde entonces sin interrupción y ha sabido mantener el típico aspecto de las tabernas de antaño. Goza es una excelente popularidad entre los cordobeses. Ofrece buenos vinos de cosecha propia, como Peseta, Platino, y el oloroso Oro Viejo, acompañado de flamenquines, rabos de toro y bacalao rebozado, un auténtico menú califal digno de degustar tanto para los propios ciudadanos como para los turistas.

Taberna Séneca

La Taberna Séneca fue fundada en el año 1874, en un edificio del año 1857 y actualmente sigue ubicada en la Plaza Séneca, número cuatro. Dada su situación así como su pertenencia a la Sociedad de Plateros, ha sido una de las más famosas tabernas de la ciudad. Tal y como las tabernas de la Sociedad de Plateros entre las que te incluye al igual que la de San Fernando, dicho establecimiento tiene la posibilidad de servir el vino Peseta, Oro Viejo, Oro Dulce y el Platino. Además, tiene en su menú una rica colección de tapas, que se elaboran en la pequeña y modesta cocina bajo la atenta supervisión de Toñi Cost.

Taberna La Fuenseca

Fundada en 1850 y ubicada en la calle Juan Rufo, 20, se puede encontrar una gran variedad de arte que cuelgan en sus paredes donde podemos encontrar desde cuadros de los pintores Pepe Amate o Juan Molina, a fotos de personalidades del mundo del espectáculo de todos los tiempos. Y es que se considera como un templo del flamenco, siendo, además, un refugio de jóvenes y consagrados músicos, pintores o carnavaleros. La cuna del arte cordobés.

Taberna El 6

Fundada en el año 1870. Recibe su nombre por el hecho de que en aquel momento seis plateros decidieron fundar seis tabernas. Todas ellas con el mismo nombre: El 6. La cocina de la casa es tradicional casera, con especialidades en su carta como: berenjenas a la miel, churrasco a la plancha, alcachofas a la montillana, pierna de cordero al horno y rabo de toro, todo regado con unos buenos vinos de la tierra. Ubicados en varios puntos de la ciudad, entre la que se encuentra la calle Carlos Rubio, 28 o en Campo Madre de Dios, a los pies de la Facultad de Derecho, dicho establecimiento es como los de antes, donde, además de consumir, los clientes llegaban para mantener una tertulia o simplemente jugar al dominó, mientras que, con el paso de los años, se ha mantenido como una de las tabernas referentes en Córdoba.

Taberna Las Beatillas

Es una de las más antiguas de Córdoba. Desde 1989 es regentada por Antonio Sánchez Salamanca que ha sabido preservar la singularidad del ambiente que caracteriza a las tabernas andaluzas y está enclavada en uno de los rincones con mayor encanto del casco histórico: el popular barrio de San Agustín. Asimismo, dicho establecimiento, que abre sus puertas en la Plaza de las Beatillas, 1, recalcan el cuidado por usar productos de primera calidad, de producción local y una elaboración 100% tradicional, así como se ha logrado forjar “a fuego lento la leyenda de la mejor taberna en Córdoba”, tal y como rezan en su página web.

Taberna Salinas

Los orígenes de esta casa se remontan al año 1879 en la calle Tundidores, 3. Con sus más de cien años de historia, hoy es un lugar de referencia en la zona histórica de la ciudad, a cincuenta metros del Templo Romano y de la Plaza de la Corredera. Y es que este establecimiento cordobés combina el calor de un buen ambiente con magníficas especialidades culinarias, ya que su oferta gastronómica se basa en la cocina tradicional andaluza y cordobesa especializada en el salmorejo, el cochinillo serrano, las manitas de cerdo, las espinacas con garbanzos, el picadillo de la tierra o las berenjenas fritas.

Taberna San Miguel o Casa El Pisto

Fundada en 1880 y ubicada en la Plaza de San Miguel. Esta taberna-estanco siempre ha estado vinculada a la vida taurina. Por su estratégica posición, ha sido protagonista para un lugar de reunión, de cita para todas las clases de la sociedad cordobesa. Por sus mesas, han pasado artistas, toreros, intelectuales, hombres de ciencia, labradores, corredores y hasta la picaresca califa. Tiene vino de Moriles para acompañar una excelente cocina casera, que brinda rabos de toro, manitas de cerdo, croquetas, albóndigas y otras excelencias.

Taberna El Potro

Es una taberna antigua llena de historia, ubicada frente al lugar que lleva su nombre, la Plaza del Potro. Fue fundada por Emilio Pérez-Barquero en el año 1894 y frecuentada por Rafael Romero de Torres, hermano de Julio Romero de Torres, cuya casa estaba muy próxima. El mismo establecimiento se define como una típica taberna cordobesa en pleno centro del Casco Histórico de Córdoba donde existe una “gran comida” en un “gran lugar”.

Taberna Regina

Fundada en 1904 y emplazada en la Plaza de Regina, algo retirada de la zona más turística, aunque merece la pena hacer una visita. Dicho establecimiento empezó una nueva etapa en el año 2014 bajo los mandos de Raquel Rodríguez y Juan Manuel Garrido, ya que la familia Seoane la regentó hasta ese año para que coexistiesen las raíces cordobesas con el apellido gallego. Basada en las tapas tradicionales cordobesas, es una grata experiencia acompañar un vino saboreando su cocina, donde destacan las papas bravas, la carne al Jerez, los callos, el rabo de toro, el salmorejo y el flamenquín.

Casa Pepe de la Judería

Taberna aneja al restaurante del mismo nombre, conserva el mismo aspecto desde su fundación en 1928 y ubicada en la calle Romero, 1. El actual establecimiento fue antaño la Taberna El Triunfo, cuyo propietario fue Manuel Criado. A este le sucedió José Giménez Aroca, y a este su actual propietario, Miguel Cabezas Morón. En la planta baja dispone de un bar de tapas y en el piso superior tiene el restaurante. Sus especialidades son el salmorejo cordobés, la sopa de pescado y mariscos con castrones de pan, merluza a la cordobesa, dorada al cava con verduritas crujientes, tortilla de rabo de toro y el foie fresco a la plancha con manzana caramelizada. En su palmarés, un Sol Repsol gracias al trabajo realizado por el equipo que capitanea Juan Pedro Secaduras.

Casa Rubio

La taberna Casa Rubio, enclavada en la Puerta de Almodóvar, fue fundada por José María Jiménez en 1932 cuando adquirió la que entonces se conocía como Taberna de El Cojo de San Nicolás datada de 1920. En su página web, se autodefine como un referente de la buena mesa, el tapeo de calidad, la mejor cocina andaluza y un servicio exquisito. Asimismo, hay que destacar que este establecimiento tiene una de las azoteas más solicitadas de la ciudad y, al igual que la Casa Pepe de la Judería, en 2022 recibieron un Sol Repsol gracias al trabajo de una carta en la que se centra en el producto y la calidad.

Taberna La Montillana

Según reza su propia página web, la taberna La Montillana se inauguró en 1948 y, desde entonces, “ha sido una parada obligatoria para los cordobeses y todo aquel que quiera disfrutar de una cocina de calidad”. En unos inicios, este establecimiento se consideró un auténtico santuario en los vinos Montilla-Moriles, aunque ahora se ha convertido en un referente en cuanto a innovación gastronómica se refiere en su ubicación en la calle San Álvaro, 5. Entre sus sugerencias destacan el salmorejo, el flamenquín, la mazamorra, el calabacín a la brasa, las berenjenas fritas y el rabo de toro, entre otras cosas.

Taberna Santa Marina

A los pies de la Iglesia de Santa Marina desde 1850, la Taberna Santa Marina es un enclave histórico dentro de la capital cordobesa, donde se encuentran una máscara mortuoria de Manolete, un antiguo mechero con el que jugaba de niño, o la medalla de la Virgen de Guadalupe comprada en México. Era una taberna muy transitada por el diestro y así se ha consolidado como una de las protagonistas en la oferta califal. Tanto es así que la gastronomía del territorio es el principal protagonista, cumpliendo con todos los requisitos promovidos por el Ayuntamiento de Córdoba.

Taberna San Cristóbal

La historia se remonta a 1942 cuando el matrimonio formado por José Salcedo Martín y Rafaela Cabello Molina, adquieren la antigua Taberna Salcedo situada en el bajo de un inmueble de la calle Mariano de Cavia. En los años sesenta el negocio se traslada al número 4 de Rodolfo Gil, su actual sede, inaugurándose el 11 de febrero de 1967 bajo la denominación de Taberna San Cristóbal. Entre sus máximos exponentes, dicho establecimiento presenta platos tradicionales cordobeses como los huevos con salmorejo, medallones o callos; aunque también con un sello inconfundible de la mano de berenjenas fritas, rabo de toro, bacalao con tomate o araña frita.

Bar Santos

Uno de los establecimientos más míticos de la ciudad de Córdoba desde la calle Magistral González Francés. ¿Dónde se puede comer una de las mejores tortillas y salmorejo de toda la ciudad? Pues en el Bar Santos. Este emplazamiento atrae a muchos turistas y es que no es para menos. Esta pequeña abrió sus puertas en 1966 y a pesar de que no cumple los 75 años requeridos, el Ayuntamiento la tiene en esta lista por su historia y siendo uno de los lugares más emblemáticos. A pesar de que su fundador Francisco Santos falleció el pasado año, el bar sigue siendo un referente en la capital cordobesa gracias a su trato, gastronomía y enclave, justo a los pies de la Mezquita Catedral.

Taberna El Santi

Desde 1912 y surtiendo tanto tradición como gastronomía cordobesa desde la calle Realejo. A pesar de su nueva gerencia, el local que alberga la Taberna Santi es una de los establecimientos más antiguos de Córdoba contando con más de cien años de antigüedad. Los desayunos con su jamón ibérico de calidad y las comidas guiadas por el salmorejo a su manera, el flamenquín de presa o los arroces, son los principales protagonistas de una taberna que es uno de los sitios que nunca decepcionará dentro de la gastronomía cordobesa.

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