Cajasur vuelve a litigar para que no se ejecute el aval de la Ronda Norte
La entidad financiera se opone a un acuerdo de la Gerencia que en el caso de que los promotores de Mirabueno no paguen le obligaría a devolver al Ayuntamiento un aval de 12,3 millones de euros
Cajasur ha anunciado que volverá a llevar a los tribunales el último acuerdo de la Gerencia Municipal de Urbanismo, que prevé la ejecución del aval que firmó con la promotora Marín Hilinger para la construcción de la Ronda Norte en Mirabueno. Según ha informado el presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo, Luis Martín, la entidad financiera se ha opuesto al último acuerdo tomado por el Consejo Rector de la Gerencia para exigir el pago voluntario del dinero que hace falta para acabar la Ronda Norte.
Este requerimiento se hace a una junta de compensación donde la promotora Marín Hilinger, en concurso de acreedores, posee el 86% de las acciones. En caso de que no se realice este pago, el acuerdo preveía que se ejecutase el aval que firmó Cajasur como garantía de las obras, valorado en más de 12,3 millones de euros. Por eso, y según ha informado Luis Martín, Cajasur ha anunciado que recurrirá al Tribunal de lo Contencioso Administrativo si la Gerencia decide seguir adelante. Y Urbanismo tiene previsto llevar hasta el final su acuerdo. En el consejo rector del próximo jueves los consejeros aprobarán la inadmisión del requerimiento de Cajasur.
La historia de la construcción de la Ronda Norte ilustra a la perfección el estallido de la burbuja inmobiliaria en Córdoba. Marín Hilinger se comprometió a construir este tramo de circunvalación al Norte de la ciudad tras lograr la urbanización de la zona de Mirabueno. Una vez construidas las casas (y vendidas en su mayoría) inició las obras, pero las abandonó cuando apenas si se había ejecutado el 30% por falta de financiación. Entonces, Urbanismo comenzó a reclamarle la ejecución de una obra que Marín Hilinger finalmente nunca reinició. La Gerencia decidió ejecutar el aval que la promotora había firmado con CajaSur para poder iniciar las obras. Con ese dinero, Urbanismo calculaba que tendría dinero suficiente para acabar la Ronda Norte. Sin embargo, el TSJA estimó que había errado a la hora de reclamar el aval y, por tanto, no pudo ejecutarlo.
Ahora, lo que la Gerencia hace es volver al punto de partida. El primer paso es reclamar el pago voluntario a la junta de compensación de Mirabueno y, además, actualizar lo que costaría a día de hoy la ejecución de unas obras paradas desde hace cinco años. Según ha informado el presidente de la GMU, Luis Martín, se estima un coste global algo superior a los 12,3 millones de euros. Con ese dinero, la Gerencia tendría que acometer el proyecto de ejecución de lo que queda de Ronda Norte (unos siete millones de euros), pagar el 21% de IVA y, además, acometer el proyecto de urbanización pendiente en la propia zona de Mirabueno.
En la junta de compensación no sólo está Marín Hilinger. También ADIF, el propio Ayuntamiento y Patrimonio del Estado, según ha apuntado Martín esta mañana.
Marín-Hilinger ha sido el último gigante inmobiliario de Córdoba en caer. A principios de marzo, sus gestores solicitaron el concurso voluntario de acreedores al verse incapaces de pagar y refinanciar una deuda total de 126 millones de euros, según han confirmado a este periódico fuentes judiciales.
La firma, propiedad del ex dueño del Córdoba CF Ángel Marín y con sede en el famoso chalet de Manolete de la Avenida Cervantes, arrastraba problemas financieros desde el estallido de la crisis inmobiliaria. El concurso de Marín-Hilinger es el segundo más importante que tramitará el Juzgado de lo Mercantil de Córdoba, después de haber resuelto y liquidado el de otra de las grandes promotoras cordobesas: Noriega, que ha sido liquidada. El concurso no sólo es de la matriz, sino también de sus empresas filiales: Eurojisa y Promager. Además, también lo han solicitado los dos matrimonios de los dos socios de la firma: Ángel Marín y Enrique Hilinger.
0