Juan Velasco es periodista y promotor cultural. Desde hace un tiempo coordina el área de Cultura de Cordópolis. Antes de eso, ha sido durante una década colaborador de la Agencia EFE en Córdoba y en Guadalajara y también ha estampado su firma en prensa especializada como Enlace Funk o Vicious Magazine. Como disc jockey, bajo el alias Juani Cash, dirige desde 2015 la promotora Jukebox Jam! y ha sido dj residente y programador en Sonora Beach (Estepona) y Gran Baba (Cádiz). También ha impulsado en Córdoba el Festival de teatro InstanTeatro (2018) y ha trabajado en la programación y la producción del Festival RíoMundi en 2018 y 2019.
Secreta de balcón
Creo que nadie ha definido mejor lo que es hacerse mayor que el humorista gráfico y escritor Juarma. “Eres joven hasta que se te pone cara de secreta”, escribió el pasado lunes en Twitter, un par de días antes de que, quien esto firma, cumpliera 37 años con la sensación de haber envejecido un lustro desde marzo de 2020.
La pandemia nos ha convertido a todos un poco en secretas. Somos policías severos disfrazados de paisano, pendientes de que nadie se salga del redil de tristeza al que el virus y la enfermedad nos ha abocado.
Vivimos tiempos de descrédito colectivo. De señalar. Aquí en Córdoba hemos visto como gente que se dedicaba al humor se han convertido en una especie de secreta de balcón (o de pantalla) que se dedica a señalar públicamente a quién no lleva mascarilla o a quien no respeta un aforo.
Por eso no me extraña nada la criminalización de las protestas juveniles de estos días. Ese señalamiento constante a quienes salen a la calle a reclamar algo. Y eso que hay que ser muy obtuso para pensar que quiénes están en las calles han salido a defender a Pablo Hasél. Hasél es la mecha, nunca el combustible.
Mi compañero Alfonso Alba describió a la perfección los efectos que tuvo sobre mis contemporáneos y yo la generación tapón, aquella que nos precedió a los de mi generación y que, a diferencia de nosotros, consiguió sueldazos, pisazos, conveniazos colectivos y el sueño de la clase media. Se lo merecían, no cabe duda. Pero este país, aparentemente, no podía repetir semejante derroche.
A la generación tapón le sucedieron los Jasp (jóvenes aunque sobradamente preparados). Estaban mejor formados, pero sus sueldos eran más bajos que los de sus mayores. A los jasp le siguieron los mileuristas, un tope salarial que pasó de ser una vergüenza a una bendición en cuestión de unos años. Lo que ha seguido es ya directamente una vergüenza nacional.
A quienes tenemos hoy entre 30 y 40 años, este país nos hurtó el futuro. La consecuencia positiva fue que nos tuvimos que centrar en vivir el presente. Pero es que, a quien hoy tiene 20 años, una pandemia les ha robado también el presente. Por eso no me extraña que sus protestas se parezcan a las que había en el pasado.
Visto lo visto, creo que a los jóvenes les debemos una disculpa y no un señalamiento.
Así que, desde este espacio y con toda la cara de un secreta en una rave: lo siento mucho, chavales.
Sobre este blog
Juan Velasco es periodista y promotor cultural. Desde hace un tiempo coordina el área de Cultura de Cordópolis. Antes de eso, ha sido durante una década colaborador de la Agencia EFE en Córdoba y en Guadalajara y también ha estampado su firma en prensa especializada como Enlace Funk o Vicious Magazine. Como disc jockey, bajo el alias Juani Cash, dirige desde 2015 la promotora Jukebox Jam! y ha sido dj residente y programador en Sonora Beach (Estepona) y Gran Baba (Cádiz). También ha impulsado en Córdoba el Festival de teatro InstanTeatro (2018) y ha trabajado en la programación y la producción del Festival RíoMundi en 2018 y 2019.
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