“¡Sí que es pot!”: Jesús León cree en la salvación también en catalán

Es el partido más importante de la temporada. Otra vez y más que cualquier anterior. El Córdoba visita al Reus el próximo domingo (20:30) dentro de la penúltima jornada de Liga en Segunda A. Un encuentro éste que tiene el deber de vencer para continuar el camino hacia su objetivo. La permanencia está en juego. Por este motivo, la afición va a viajar para apoyar al equipo de Sandoval. Pero toda ayuda es bien recibida, es lo que piensan desde el club. De ahí que este jueves el presidente de la entidad califal, Jesús León, haya decidido lanzar un mensaje a los cordobeses y andaluces afincados en Cataluña. “¡Sí que es pot!”, exclama el mandatario blanquiverde en un vídeo en el que demuestra que cree en la salvación también en catalán.

La nota curiosa de la iniciativa del Córdoba es precisamente ésta, que Jesús León se dirige a seguidores blanquiverdes y otras personas naturales de Andalucía residentes en ciudades próximas a Reus en catalán. Incluso solicita el respaldo al cuadro califal de “todos los catalanes que simpatizan” con el club. De esta forma, la entidad pretende recabar el mayor ánimo posible en torno a los jugadores de José Ramón Sandoval en esta cita crucial. Y para ello, han entendido en El Arcángel, nada como el sentido del humor por medio de una campaña que quizá cuente con más capítulos durante el día en las redes sociales cordobesistas.

“Hola. Soy Jesús León, presidente del Córdoba Club de Fútbol. Este mensaje va dirigido a todos los cordobeses y andaluces que viven o trabajan en Cataluña. Y a todos los catalanes que simpatizan con nuestro querido club”, inicia el rector del club califal su discurso. Lo pronuncia, en efecto, en catalán, con subtítulos en español. “El próximo domingo, nuestro equipo disputa una final frente al Reus que, si la ganamos, nos puede ayudar a quedarnos un año más en la Liga. Si puedes, ven a animar al Córdoba con nuestra valiente afición”, continúa León. El presidente de la entidad concluye con la proclama ya habitual de “sí se puede”. Aunque en catalán: “¡Sí que es pot!”.