Sin actividad hasta nueva orden

De repente, cambio de planes. La idea ahora es cesar la actividad hasta nueva orden. O dicho de otro modo, el Córdoba encara un fin de semana en blanco tras el relevo en el banquillo. Francisco ya es historia y el encargado de suplirle es quien lograra dos meses antes la histórica permanencia del conjunto blanquiverde en Segunda A. Está de vuelta Sandoval, aunque en realidad su regreso no va a ser un hecho a todos los efectos hasta el lunes. Precisamente entonces es cuando el equipo va a retomar los entrenamientos toda vez que el club decidiera suspender todo el programa para el sábado y el domingo. En este sentido, el cuadro califal no va a disputar el que habría de ser su cuarto amistoso de pretemporada en Linares. Una decisión que anunciara la entidad a través de sus canales informativos. El choque no es lo único que desaparece de la agenda, pues tampoco va a haber, en efecto, sesiones en la Ciudad Deportiva.

El Córdoba debía completar el sábado una jornada maratoniana. En la matinal, tenía planteado una práctica en el Camino de Carbonell. Por la tarde noche, era momento para sumar más ritmo de juego en Linarejos. Ni lo uno ni lo otro va a tener lugar. Ésta es la medida adoptada tras el cambio de entrenador. Así, después del entrenamiento de este viernes, a puerta cerrada, no va a haber actividad para el plantel hasta dentro de tres días. En lo que respecta al choque en tierras jiennenses, la entidad califal opta por no participar en el Trofeo Linarejos. En el mismo tenía que medir sus fuerzas al Linares Deportivo, que la campaña venidera va a militar en Tercera. El encuentro se iba a disputar a partir de las 20:45, pero el giro de los acontecimientos lleva al club a rehusar su presencia en la localidad vecina.

Del mismo modo, el conjunto blanquiverde no se va a ejercitar hasta el lunes. Es la otra parte de la mencionada medida de adaptación a la nueva realidad. El domingo, en principio, no había previsto entrenamiento. Ahora es un hecho tanto como que en los últimos días el trabajo se desarrolló de manera poco frecuente. El lunes los califales tuvieron una sesión matinal en Montecastillo, la última en Jerez, y se enfrentaron a la Balompédica Linense. Tras el descanso del martes, el equipo retomó el pulso a su preparación el miércoles con una práctica por la mañana y la extraña suspensión de la programada para la tarde. Fue la antesala de un mañana de baja intensidad, como la del jueves, con un entrenamiento que no llegó a la hora y que pareció llevarse a cabo únicamente para cubrir expediente. Igual que sucede este viernes, con el plantel en la Ciudad Deportiva sin saber quién lo dirige. El regreso a la actividad, por cierto, va a traer consigo un cerrojazo a las puertas de las instalaciones del Camino de Carbonell.